Alfredo Guevara.-
Cd. Victoria, Tam.-
El desborde de las corrientes o éxodo de migrantes, provenientes de Tapachula, Chiapas, hacia la zona norte del país, está a punto de ocasionar una crisis de comercio exterior que paralizaría al 70 por ciento la cadena de suministros de las grandes empresas de exportación.
Tan solo el puente de “Las Américas”, en Ciudad Juárez, Chihuahua, tiene tres semanas con un aletargamiento de vigilancia e inspección, al grado de que una tercera parte de los cruces normales de carga hacia el paso Texas, en Estados Unidos, se han caído, confirmó Jorge Alfredo Lera Mejía.
El Vicepresidente de la Liga de Economistas de la zona noreste del país, estudioso e investigador del tema de la migración, expuso que en varios cruces internacionales hay largas filas y horas de espera de transportes de carga y mercancías de exportación, por la presencia de migrantes, rompiendo el principio del “jus in time”, es decir, de la llegada justo a tiempo.
“Esto mismo sucedió en el puente Eagle Pass, en Texas, Estados Unidos que tiene más de tres semanas cerrado al paso de la carga de mercancías y lo que se puede saber es que Reynosa, Matamoros, Nuevo Laredo y el puente de Colombia en Nuevo León no ha llegado a esos extremos”, explicó.
No obstante, ante la llegada de contingentes nuevos de migrantes, pudiera ser que se tomen las medidas iniciales en “Las Américas” de Ciudad Juárez como el de Eagle Pass, que, sumado a la parálisis de presupuesto del Gobierno de Estados Unidos, no habría sueldo para trabajadores estadounidenses que realizan labores de inspección.
Y es que durante las últimas tres semanas se han desbordado las corrientes migratorias desde Tapachula, Chiapas, que para la Guardia Nacional (GN) y el Instituto Nacional de Migración (INM) es imposible detener, porque además de que vienen en familias, ya no quieren visa humanitaria y están rompiendo los esquemas de control.
Lera Mejía estimó que las cadenas de suministro de las grandes empresas de exportación, la industria maquiladora y otras se verían afectadas en lugares como Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Sonora y Baja California, “tema que no se ha abordado con seriedad”.
