Rogelio Rodríguez Mendoza.
Cd. Victoria, Tam.- El exceso de lirio acuático en el sistema lagunario del sur de Tamaulipas, hace peligrar el abasto de agua para alrededor de 800 mil personas que habitan en los municipios de Tampico, Madero y Altamira, además de poner en riesgo su salud, alertó Ángel Covarrubias Villaverde, diputado local del PRI.
Ante la gravedad del problema, el legislador presentó una iniciativa de punto de acuerdo para hacer un exhorto a diferentes instancias de gobierno, para que atiendan con urgencia la situación.
El llamado para la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Recursos Hidráulicos, y los alcaldes de Tampico, Madero y Altamira, es para que “a la brevedad y de manera urgente implementen acciones coordinadas para retirar el lirio acuático del sistema lagunario, en virtud de las afectaciones medioambientales que produce el exceso de esta especie y del riesgo en materia de salubridad que representa para las familias que utilizan el agua de estos cuerpos hídricos”.
El sistema lagunario del rio Tamesí se integra por las lagunas de Champayán, Quintero, La Tortuga, Camalote, Mayorazgo, La Costa, La Puerta, Tancol, la Escondida y Chairel. Desde ellas se abastece de agua a alrededor de 800 mil habitantes de los tres municipios sureños tamaulipecos.
También de las lagunas se suministra de agua a la Refinería Francisco I. Madero, a la Planta Generadora de Energía Eléctrica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Altamira, así como al resto de las industrias del complejo industrial portuario de Altamira.
Expertos ambientalistas sostienen que, de las 42 mil 750 hectáreas de laguna que componen el sistema lagunario del Río Támesis, el 60% se encuentra afectado por este tipo de flora, lo cual, indudablemente, provoca un riesgo para la salud de todas las personas que aprovechan el agua de estos cuerpos hídricos.
“En un primer término, tenemos las implicaciones sanitarias que van desde el mal olor provocado por el poco movimiento y eventual estancamiento del agua; situación que afectaría directa y gravemente la salud de las personas que utilizan este vital recurso, lo anterior, aunado a la propagación de larvas de zancudos y otros insectos transmisores de enfermedades como el dengue, el zika, entre otras” mencionó el legislador.