Patricia Azuara.-
Cd. Victoria, Tam.-
La totalidad de las empresas y negocios tienen que cumplir con reglamentos por uso de suelo y protección civil, que les cuestan entre 30 y 50 mil pesos al año. Para quienes violan estas disposiciones hay multas hasta de medio millón de pesos.
El director de la Federación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo de Tamaulipas, Abraham Rodríguez Padrón, detalló lo anterior, al referir que la serie de reglas y sanciones exorbitantes muchas veces provocan actos de corrupción.
Explicó que la Ley de Asentamientos Humanos, Territorial y Urbano de Estado de Tamaulipas especifica que todo ramo empresarial tiene que solicitar el uso de suelo y la licencia de funcionamiento al Ayuntamiento que le compete.
Quien no lo haga se hará acreedor a multas que van desde tres mil a cinco mil UMAS, es decir, entre 300 mil y 500 mil pesos.
“Cuando vas a pedir esta licencia te piden como requisito tener el programa de Protección Civil, para que el negocio que se va a abrir cuente con el visto bueno de Municipio, todo eso hace que tenga una erogación por el pago de los permisos del programa”.
Y para terminar de “enterrar” al sector productivo, las dependencias encargadas del cobro se aprovecharon tras la pandemia, de que muchos negocios no renovaron sus permisos y en vez de impulsarlos y apoyarlos para su regulación, los golpean con multas que no se pueden pagar.
“Hoy vuelven a revisar la mayoría de los municipios por el tema de lo que pasó en Madero el tema de la iglesia, comienzan a ver si los programas de Protección Civil están actualizados y entonces comenzamos a intervenir, de por sí la erogación de esos permisos anda entre los 20 mil y 50 mil pesos por año, imagínate con una multa porque no lo hizo”.
Sin contar con toda la carga impositiva, el incremento de salarios, la modificación del aguinaldo, toda esa serie de situaciones, “Lógicamente que los empresarios las resienten y dice que mejor cierro y me voy a la informalidad”.
“Esa es la triste realidad del empresariado. Se está aprovechando, esto es como el tránsito, hay multas por conducir con aliento alcohólico que son altas, pero le deja libre albedrío al tránsito que de pronto se puede prestar a corrupción”.
Sostuvo que llevaron al Congreso del Estado la propuesta para clasificar los negocios por giro y tamaño y que no todos se midan “con la misma vara”.
“Nosotros lo que buscamos es una reforma que permita que los negocios sean tipificados por tamaños por giros por todo eso, no todos medidos de la misma manera”.
“Los fondos son específicamente buenos para agarrar a gente que trata de hacer cosas malas, pero también hay una ley que tiene dientes y que le permite a otro que abuse y cobre y se fomente corrupción”.
En ese sentido, comerciantes consultados, quienes coincidieron con los cobros y multas que se hacen, propusieron esquemas en las que todo salgan beneficiados, entre estos, el que sea el propio gobierno, a través de becarios o los propios empleados, quienes hagan las revisiones, de tal forma que los costos sean menores.
