Greg Abbott, gobernador de Texas, presume en redes sociales la construcción de su muro fronterizo, pero se trata de un megaproyecto sin pies ni cabeza, entre el estado que encabeza y el territorio mexicano, cuyo objetivo, de detener el paso de migrantes que cruzan desde el Río Bravo, no cumple.
Un medio informativo pudo constatar que los predios, ejidos y ranchos donde el republicano construye su propio muro fronterizo, realmente no representan un obstáculo para el gran número de personas migrantes, principalmente provenientes de la región de centroamericana, que cada día intentan internarse a territorio estadunidense desde estados mexicanos como Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila.
A través de un recorrido desde Laredo hasta Brownsville, se pudo observar que la gran mayoría de la frontera chica entre Estados Unidos y México se encuentra completamente libre de obstáculos.
Además de que las porciones más representativas de un muro no son de la barrera que erige Abbott, sino que pertenecen a proyectos federales, que se han realizado en administraciones anteriores, como la de Donald Trump, o se trata de del muro que el actual presidente, Joe Biden, ordenó reforzar.
Además, y aunque lo presume en redes sociales, los trabajos del muro del gobernador Abbott cesan durante los fines de semana.
Se pudo acceder a un plantío en Brownsville, Texas, en el condado de Cameron, colindante con el estado de Tamaulipas. Ahí, en completa oscuridad, se encontraban resguardadas toneladas de materiales, que serán utilizados por el gobierno estatal para continuar con el proyecto. Obra de gran magnitud
La complejidad del proyecto radica en que, para que Abbott pudiera concluir con esta obra de gran magnitud, tendría que convencer a los dueños de los terrenos fronterizos, ranchos, ejidos y plantíos, para que estén de acuerdo en permitir los trabajos del estado en sus propiedades.
Este tipo de construcción se realiza a través de acuerdos de uso de la propiedad por partes de terceros, celebrado entre el gobierno de Texas y el Rancho Faith, en el condado de Webb, en Austin, Texas.
El documento muestra, además, que solamente los trabajos legales para comenzar la construcción del muro pueden tardar más de medio año, pues fue en enero de 2023 que se suscribió el acuerdo, y la construcción comenzó hasta el mes de octubre.
Las indicaciones del acuerdo explican que el muro medirá poco más de 9 metros de alto y tendrá una profundidad de más de medio metro. Además, contará con una placa de concreto de base. También se prevé que incluya puestos de vigilancia y de detención, que presumiblemente, manejarán autoridades de Texas.
Según ha dado a conocer el propio gobernador Greg Abbott, tiene construcciones avanzadas ya en los condados de Maverick y Val Verde, en Texas, además de una barrera con el estado de Nuevo México, desde donde asegura que hay migrantes cruzando.
Sin embargo, y aunque se trata de un imponente proyecto, los menos de 200 metros de largo de muro se puede evitar de manera fácil, en caso de que una persona intente cruzar a través de la frontera.
Durante sus conferencias matutinas el presidente Andrés Manuel López Obrador ha desestimado la construcción de dicho muro en el lado texano, lo cual el pasado 12 de julio calificó como “politiquería”.
“(La migración) no se va a resolver con muros ni militarizando la frontera. Todo eso que está haciendo el Gobernador de Texas es… Ya no voy a usar la palabra porque… No, sí la uso, es politiquería, es publicidad, es una actitud demagógica, chafa”, sentenció el mandatario.
Hace un mes, 21 de septiembre, el gobierno de Texas declaró una «invasión» en su territorio por el paso de migrantes desde México, por lo que desplegó elementos de la Guardia Nacional, del Departamento de Seguridad Pública y de la policía local en su frontera sur.
«El fracaso del gobierno federal me obliga a invocar el Artículo I de la Constitución estadunidense con lo que se autoriza al estado de Texas para proteger su territorio de la invasión de carteles de la droga mexicanos», escribió el gobernador Abott en una carta al presidente Joe Biden.
«Con esa autoridad, Texas aumentará los esfuerzos para repeler y regresar a cualquier migrante que pretenda entrar a nuestro estado», redactó.
Con información de: milenio.com