Agencias.-
Más de 50 migrantes, incluyendo niños, irrumpieron en Estados Unidos desde México al cruzar el río Bravo, derribando una valla de púas y enfrentándose a la Guardia Nacional.
Estos hechos ocurrieron en la frontera entre Matamoros, Tamaulipas, y Brownsville, Texas.
Tras ser retenidos por más de 12 horas, los migrantes, desesperados, intentaron abrir un hueco en la alambrada.
Las fuerzas estadounidenses intentaron contenerlos, pero la situación se volvió tensa.
Finalmente, cedieron y permitieron que el grupo avanzara a suelo estadounidense.