diciembre 11, 2024
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“Chichí” Santillana es un auténtico ídolo del barrio

noviembre 14, 2023 | 272 vistas

Es en la calle cuando de niño se juega con lo que se tenga en la mano y se aprenden las reglas del barrio, que deben respetarse al pie de la letra.

De esos barrios y colonias han surgido infinidad de figuras que ya de adultos han tenido la oportunidad de pisar terreno profesional y otros destacan a nivel amateur.

Aquí en Victoria existen un sinnúmero de atletas surgidos de la calle que al llegar a la “edad de oro” siguen en las canchas como si “el padre tiempo” se haya detenido para dar la oportunidad que sigan en plena actividad para ser ejemplo de la niñez y juventud

En ese sentido tenemos a un baluarte de calle que a sus 70 años continúa jugando su deporte favorito, como es el futbol.

Se trata pues del “Chichí, Benjamín Santillana Partida que a sus 70 años de edad va y viene en el medio campo del Real Mainero y sigue siendo un jugador todavía de buen nivel formando parte del equipo que por cerca de 30 años dirige y patrocina Enrique Zapata en el futbol de veteranos.

De acuerdo a un comunicado que nos facilita Edgar Jaranillo Alanís, hace saber que en fecha reciente Real Mainero cayó 0-2 frente al poderoso y legendario Unión Sosa, se nos dijo que el Real Mainero se presentó con un equipo limitado y su portero detuvo un tiro de castigo que por poco salva el encuentro.

Dice el ídolo del barrio:

“Aquí andamos tirando patadas, hasta donde Dios diga, prácticamente no tuvimos cambios para jugarle de tú a tú al Unión Sosa, y así no se puede ganar.”

Agrega “El Chichí”: “sigo jugando futbol organizado y debuté desde los 12 años con Deportivo Zamarrón en la categoría Infantil y en aquellos años nos dirigía “La Calaca” Refugio Zúñiga, estuve trabajando 28 años en los Estados Unidos y gracias a Dios ya me regresé a mi querida Capital…”

Se le cuestionó que hasta cuándo pensaba seguir jugando, él afirma: “Hasta donde Dios diga, hasta que tenga fuerzas en mis piernas”.

70 años “no son nada” para quienes no se rinden y continúan en plena actividad aunque ya no con la misma intensidad, pero sí con ese ímpetu como en sus años mozos.

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