Fue avistado nuevamente en aguas del Caribe un ejemplar de tiburón de Groenlandia, reconocido como el animal más antiguo del mundo, cerca de las costas de Belice, a miles de kilómetros de su hábitat natural.
De acuerdo con un estudio publicado por Marine Biology, el encuentro fue inesperado, pues estos animales suelen vivir en aguas frías y profundas del Atlántico y Ártico.
“De repente vimos una criatura perezosa y de movimiento muy lento bajo la superficie del agua. Parecía algo que existiría en tiempos prehistóricos”, detalló Devanshi Kasana, biólogo del laboratorio de Conservación y Ecología de Predadores de la Universidad Internacional de Florida, según recoge National Geographic.
Los cálculos realizados por los científicos sugieren que este individuo en particular podría tener 518 años.
Los tiburones de Groenlandia, también conocidos como Somniosus microcephalus, por lo general son notables por su longevidad y crecimiento lento, aproximadamente un centímetro por año, alcanzando tamaños de hasta cinco o seis metros.
Las hembras de esta especie no alcanzan la madurez sexual hasta superar los 100 años.
Debido a que esta especie de tiburón no cuenta con espinas de aletas y tampoco tiene tejidos duros para calcular su edad, como suele hacerse con la mayoría de estos animales acuáticos, su tiempo de vida se calcula gracias a la datación de carbono de una proteína al interior de sus ojos que no envejece y se mantiene preservada como si fuera un fósil en ámbar.
“Una teoría para explicar su longevidad es que el tiburón de Groenlandia tiene un metabolismo muy lento, una adaptación a las aguas profundas y frías que habita”, explica la agencia National Ocean Service.
“Aunque el tiburón de Groenlandia solía cazarse por su aceite de hígado, la mayoría de los tiburones de Groenlandia que acaban en las redes y sedales de pesca ahora se capturan por accidente. Reducir las capturas incidentales es fundamental para conservar esta especie única”, agrega.
Con información de: aristeguinoticias.com