Una tragedia familiar se registró en el municipio de Naucalpan, Estado de México, que dejó tres víctimas mortales, cuando Pedro “N”, identificado como el presunto responsable de un feminicidio y un doble homicidio, al acabar con la vida de su ex esposa, Jaqueline “N”, y envenenando a sus dos hijas menores, de cuatro y un año de edad, para luego quitarse la vida mediante un profundo corte en el cuello.
La historia del caso se remonta aproximadamente cuatro meses atrás, cuando Jaqueline decidió poner fin a su relación con Pedro debido a problemas conyugales, violencia doméstica y una calidad de vida insostenible.
Aunque se separaron, Pedro persistió en acosar a Jaqueline, generando una constante sensación de amenaza que llevó a la mujer a concertar un encuentro en su domicilio para discutir y, posiblemente, llegar a una resolución pacífica.
Pero el encuentro tomó un giro cuando Pedro, por celos y furia, no aceptó la negativa de Jaqueline de regresar a su lado dada la historia de violencia previa.
La pelea se tornó violenta, culminando en golpes, estrangulamiento y, de manera horrenda, el descuartizamiento de Jaqueline mediante el uso de un esmeril.
Pedro ingresó a la habitación donde descansaban sus dos hijas pequeñas y les administró veneno en un vaso con agua, arrebatándoles la vida de manera. A pesar de los llamados de auxilio y gritos que alertaron a los vecinos, la llegada de la policía fue tarde, al igual que la llegada de los servicios de emergencia, alertada por los vecinos.
El sitio del crimen fue asegurado, y se solicitó la intervención del Ministerio Público. Tras las diligencias ministeriales y el levantamiento de los cadáveres, se inició una investigación por el delito de homicidio. Al mismo tiempo, peritos de la Fiscalía Mexiquense están llevando a cabo análisis para ver las circunstancias precisas sobre la muerte de las víctimas.
Con información de: infobae.com
