José del Carmen Perales Rodríguez.-
Cd. Victoria, Tam.-
La violencia contra la mujer, además de ser un problema serio de salud pública, ocurre en la mayoría de los casos en la vida privada y de acuerdo con los casos denunciados, que no son todos, la han sufrido tres de cada cuatro mujeres, reveló Laura Gaither Jiménez.
Durante una conferencia sobre este tema, la especialista en salud mental detalló que los principales tipos de violencia que se denuncian son la psicológica, sexual y física, aunque también hay un importante porcentaje de tipo económica.
“De acuerdo con la ONU, la violencia contra la mujer es todo acto de violencia de género que pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto en la vida pública o privada”, expuso.
Gaither Jiménez detalló que son actos no exclusivos de la vida pública, porque al interior de los hogares ocurre todo tipo de violencia, incluso sexual, porque en el contexto de una cultura equivocadamente se valida que las personas puedan someterse, factor que incrementa ese tipo de violencia.
“Es un problema de salud pública porque tiene consecuencias en lo social, la salud física y mental, la violencia provoca muertes todos los días, de acuerdo con las estadísticas nacionales e internacionales, además, quienes son víctimas sufren lesiones, discapacidad o problemas de salud”, apuntó.
En ese sentido, la Directora del Centro de Integración Juvenil (CIJ) expuso que a nivel nacional en 2022 el Secretariado de Seguridad Pública recibió casi un millón 200 mil llamadas de emergencia por violencia en el país, mientras que a septiembre de este año el registro era de casi 900 mil.
“Se considera que el 75 por ciento de las mujeres ha sufrido un tipo de violencia y la psicológica representa el 53 por ciento, sexual 49 por ciento, física 34 por ciento, económica 27 por ciento y ocurren en el país diez feminicidios al día”, detalló.
Finalmente, Gaither Jiménez subrayó que “es importante detenernos y reflexionar sobre estas cifras que no solo son números, que no son exactos porque no siempre se reportan, hay subregistros pero nos dicen hacia dónde tenemos que dirigir las acciones y cuáles son las características del problema”.