Sibongile Mani, una estudiante sudafricana había estado recibiendo del gobierno un apoyo para cursar sus materias en la Universidad Walter Sisulu en Mthatha, Cabo Oriental, esto en forma de una beca alimentaria de 85 libras esterlinas, un aproximado de mil 800 pesos que recibiría cada mes.
Sin embargo, un día algo totalmente impensable sucedió, pues en su cuenta bancaria había una beca millonaria con una cantidad inusualmente grande. A pesar de lo extraño que parecía, Sibongile Mani decidió no denunciar este hecho y lo aceptó para vivir mejor.
Mani gastó su nueva fortuna en ropa, incluyendo piezas de diseñador, iPhones para ella y sus amigos e incluso los invito a un bar donde gasto gran parte del dinero en botellas de whisky elegantes.
A pesar de todo, las cosas no siguieron así por mucho tiempo y la vida de Mani se iría en picada luego de recibir del supermercado un depósito de un millón de euros, situación que fue denunciada y que termino con su detención por fraude y robo.,
Sibongile Mani fue sentenciada a pasar cinco años en prisión por gastar miles de euros que no le pertenecían, sin embargo, su abogado argumento que la joven no representaba algún peligro para la sociedad y que el error había sido responsabilidad del Plan Nacional de Ayuda Financiera para Estudiantes.
Ante esto, la sentencia de Mani fue suspendida y solo tendrá que cumplir con 14 horas de servicio comunitario, sin embargo, se le advirtió que ir a prisión si comete otro delito de robo o fraude.
Con información de: telediario.mx
