Ernesto H. Salgado / Contacto
Autoridades de migración de Estados Unidos temen que la firma de una nueva ley contra migrantes avalada por el Gobernador de Texas provoque una oleada de migrantes que buscarán pasar el río Bravo antes de que entre en vigor, en marzo, según comentaron agentes que pidieron no ser identificados.
La ley Abbott, que entrará en vigor en marzo, permitirá a cualquier agente de la ley de Texas arrestar a personas sospechosas de haber ingresado al país ilegalmente. Una vez bajo custodia, podrían aceptar la orden de un juez de Texas de abandonar Estados Unidos o ser procesados por delitos menores de entrada ilegal. Los inmigrantes que no se vayan podrían enfrentar arrestos nuevamente bajo cargos de delitos más graves.
El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, aprobó el lunes nuevos y amplios poderes que permiten a la policía arrestar a inmigrantes que cruzan ilegalmente la frontera de Estados Unidos y otorgan a los jueces locales autoridad para ordenarles que abandonen el país, poniendo a prueba los límites de hasta qué punto un estado puede ir a hacer cumplir las leyes de inmigración.
Residentes de Brownsville han calificado la medida como el intento más dramático por parte de un estado de controlar la inmigración desde una ley de Arizona de 2010 –denunciada por los críticos como el proyecto de ley “Muéstrame tus papeles”–
La Unión Estadounidense de Libertades Civiles de Texas dijo que impugnaría la medida en los tribunales. Más de 20 demócratas del Congreso también firmaron una carta instando al Departamento de Justicia de Estados Unidos a presentar una demanda para detener la ley, conocida como Proyecto de Ley del Senado 4.
“La SB 4 es peligrosa para el pueblo de Texas e interfiere con la autoridad exclusiva del Gobierno federal sobre inmigración y asuntos exteriores”, decía la carta.
Según la ley de Texas, los inmigrantes a los que se les ordene salir serían enviados a los puertos de entrada a lo largo de la frontera con México, incluso si no son ciudadanos mexicanos. En septiembre y octubre, los venezolanos fueron la nacionalidad más arrestada por cruzar ilegalmente la frontera de Estados Unidos.
Durante el debate en la Cámara de Representantes de Texas en noviembre, el representante estatal republicano David Spiller dijo que la aplicación de la ley se llevaría a cabo principalmente en los condados fronterizos. Pero también rechazó varios esfuerzos de los demócratas para restringir la ley, incluida una propuesta de exclusión para la policía en los campus universitarios.
La SB4, como se conoce a esta ley, es considerada una de las leyes migrantes más estrictas en la historia de Estados Unidos, porque convierte en delito menor el que un extranjero “ingrese o intente ingresar al estado de Texas desde una nación extranjera” de forma irregular y en caso de reincidencia podría pasar hasta 20 años en prisión.
La meta de esta ley es parar la oleada de ingresos ilegales de extranjeros a Texas”, dijo el Gobernador al firmar la ley, y destacó que durante el gobierno de Biden, iniciado en enero de 2021, han pasado la frontera más de ocho millones de migrantes.
Abbott también firmó otros dos proyectos de ley, incluyendo la SB3, que asigna mil 540 millones de dólares adicionales para la construcción del muro fronterizo y el financiamiento de operaciones de seguridad en la región, incluyendo fondos a los departamentos de policía para implementar la SB4.
A finales de noviembre, el Gobernador republicano promulgó una ley que endurece las penas por tráfico de seres humanos.
Cabe señalar que esta semana un grupo nutrido de migrantes de diferentes nacionalidades como Guatemala, Venezuela, entre otros, se cruzó ilegalmente por el río Bravo este lunes, con la esperanza de ingresar a los Estados Unidos.
Diferentes motivos son los que tienen los migrantes para tratar de meterse a la Unión Americana, aunque sea de esta forma ilegal, ya que tienen diversas urgencias.
Uno de los migrantes que se cruzó la tarde de este lunes por el río Bravo, de origen guatemalteco, va para poder ver a su hija que se encuentra en Ohio y que está internada en un hospital, debido a problemas con sus pulmones, y en su desesperación intentará cruzarse por el río para pedir que lo dejen llegar con su hija.
Otros, buscan encontrarse con demás familiares, para tener una mejor vida, saliendo de sus países en donde además de situaciones de inseguridad, tampoco hay oportunidades de trabajo y por eso se salen de sus países.
A pesar de que las autoridades americanas los exhortan a no cruzarse por el río, y a pedir asilo a través de la aplicación del CBP-ONE, los migrantes llegan decididos a cruzarse por el río, porque saben de testimonios que así han logrado introducirse en los Estados Unidos.
Se estima que hayan sido alrededor de dos mil migrantes los que este lunes se pasaron ilegalmente por las aguas del río Bravo, en donde iban hombres, mujeres y niños, así como personas de la tercera edad.