Teresa Macías / El Sol de Tampico
A dos meses de que comience la veda de camarón, ya el 50 por ciento de los barcos dedicados a esta actividad (182) se encuentran varados en los muelles de Tampico.
Se han visto impactados por el alto precio del diésel que les ha complicado operar con los niveles de pesca que se han registrado en los meses recientes.
El presidente de la Federación de Cooperativas del sur de Tamaulipas, Canuto González Miranda, mencionó que ha estado escaseando la pesca y muchos armadores están parando sus embarcaciones.
Advirtió el representante del gremio de pescadores, que esta situación es debido a que el precio del diésel está muy elevado, pues se vende en más de 24 pesos por litro.
“De hecho, algunos armadores desde el pasado mes de diciembre dejaron la actividad, y en enero se quedaron amarrados los barcos”.
Si un barco camaronero logra pescar diez toneladas no le alcanza para sustentar los costos operativos, que incluyen a los sueldos y el combustible, ya que un barco requiere al menos 30 mil litros de diésel, además de artes de pesca, comida y lubricantes, con ello ya se eleva a más de un millón de pesos.
Además, hay un riesgo de que se descomponga alguna parte del barco, y entonces ya se complicaron las cosas.
Los fuertes armadores fuertes que cuentan con una buena flotilla de barcos, andan navegando, pero los que tienen uno o dos, los tienen varados, hay uno de sus clientes que tiene seis barcos detenidos, comentó González.
Los pescadores de esta especie son los que se ven muy afectados por la falta de trabajo, señaló que sobreviven como pueden.
Recibieron hace unos días el recurso de Bienpesca les dieron los siete mil 200 pesos, pero no es suficiente para superar estos meses de falta de pesca.
