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Sherri Moody, una maestra de 51 años, enfermó gravemente tras un viaje de estudios.
Lo que comenzó como un resfriado se convirtió en una neumonía doble y luego en un choque séptico.
La infección era tan fuerte que le provocó la amputación de sus cuatro extremidades.
Sherri pasó semanas en el hospital, luchando por su vida. Incluso la tuvieron que poner en coma inducido.
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NUNCA PERDIÓ LA ESPERANZA
A pesar de todo, ella nunca perdió la esperanza. Con el apoyo de su familia y amigos, comenzó a adaptarse a su nueva vida.
En agosto de 2023, Sherri regresó a casa. Aprender a vivir sin sus extremidades no ha sido fácil, pero ella está decidida a seguir adelante.
NUEVO DESAFÍO
Su esposo, David, la cuida a tiempo completo y juntos están enfrentando este nuevo desafío.
Sherri es un ejemplo de fuerza y resiliencia. Su historia nos enseña que incluso en los momentos más difíciles, siempre hay esperanza.
