Agencias.-
“Un Actor Malo” es una de las películas mexicanas que todos deberían ver. Dirigida por Jorge Cuchí, este drama se desarrolla en el set de filmación de una película, donde todo toma un giro inesperado cuando el actor principal toma una decisión que afecta a su coprotagonista.
Así es como se abre una conversación sobre el consentimiento, el abuso y la importancia de creerle a las víctimas. La película mexicana cuenta con Alfonso Dosal, recién salido de un gran papel en la película de terror “Huesera”, y Fiona Palomo, quienes interpretan a dos compañeros de escena que están participando en una película.
Todo comienza bien, el ambiente es relajado y los actores y el equipo de filmación trabajan de manera armónica y fluida, pero todo cambia cuando, después de tener una conversación sobre cómo se filman las escenas de sexo en las películas, Daniel, el actor principal, considera que a la película le falta algo y que él tiene la respuesta.
Lo que sigue es una historia incómoda, difícil de ver y dolorosa, que refleja una realidad que se vive en México y en el mundo, lo que genera una sensación de importancia y de injusticia, y que deja en claro que hay muchas fallas en el sistema. La historia (basada en un caso real ocurrido en Hollywood) llegará al público en general el próximo cuatro de abril.
El caso real es el de “The Last Tango in Paris”, donde hay una escena de sexo entre Marlon Brando y Maria Schneider que se volvió fatídicamente icónica. Años después, Schneider reveló que mucho de la escena se realizó sin su consentimiento y que se había dado una situación de abuso (ya que la escena de sexo no fue actuada), pero que nadie le creyó en su momento.
