Juan Hernández / El Sol de Tampico
El extravío de un menor en playa Miramar generó una intensa movilización de diferentes corporaciones de auxilio, quienes activaron los protocolos establecidos para su búsqueda y localización; autoridades piden a los padres de familias estar atentos y nunca perder la vista a los menores.
El código naranja fue activado tras la solicitud de apoyo por parte de la madre del menor, quien dijo a los guardavidas que bastaron unos minutos para que se le perdiera de vista a su hijo, un pequeñito de unos dos años.
Rápidamente, personal de guardavidas y de la Secretaría de Marina asignados a los “nidos” a la orilla de la playa, implementaron la búsqueda del menor.
La desesperación invadió a la familia, quienes pasaron de la alegría a la angustia de no poder encontrar al pequeñito.
Después de algunos minutos, finalmente se localizó al menor y posteriormente entregado a sus familiares, quienes agradecieron el apoyo brindado por el personal de las mencionadas dependencias.
Según se informó, esta familia arribó al máximo destino turístico del sur del estado durante la mañana de este martes y se instalaron a la altura de la torre 7, para pasar un rato de esparcimiento, sin imaginar lo que el destino les tenía preparado.
Comentaron que todo transcurría con normalidad, hasta que de pronto dejaron de ver al menor, comenzando la angustia entre los familiares, la alerta fue activada alrededor de las 12 horas y culminó 20 minutos después con la localización del menor.
El personal de emergencias señaló que regularmente los niños se desorientan con facilidad y, en este caso, el pequeñito caminó alrededor de cien metros.
De acuerdo a datos del Sistema DIF de Ciudad Madero, durante el periodo vacacional de Semana Santa atienden a un promedio de 300 reportes de menores extraviados.
