La francesa Anouk Garnier ascendió, a pulso y con una cuerda, 110 metros de la Torre Eiffel, del suelo al segundo piso del emblemático monumento, estableciendo un nuevo récord mundial en esta disciplina.
Con la fuerza únicamente de brazos y piernas, Garnier, doble campeona mundial de carreras de obstáculos, tardó poco más de 18 minutos en ascender al segundo piso de la Torre Eiffel, pulverizando la plusmarca mundial que tenía el sudafricano Thomas Van Tonder con 90 metros.
En categoría femenina, el récord pertenecía a la danesa Ida Mathilde Steensgaard con ‘sólo’ 26 metros.
«Es un sueño convertido en realidad. Algo mágico», acertó a decir Garnier, de 34 años, al abrazarse, entre lágrimas, a sus familiares tras lograr la hazaña.
«Nunca dudé de que podía hacerlo», añadió Anouk Garnier, que pasó un año para preparase para este momento.
Tras unos días de reposo, Anouk Garnier volverá a las carreras de obstáculos y el 9 de mayo será una de las relevistas de la llama olímpica en Marsella.