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Seis miembros de una familia contrajeron gusanos cerebrales después de consumir carne de oso negro en Dakota del Sur.
La carne había sido cazada en el norte de Canadá, donde esta práctica es legal.
Nueve miembros de la familia comieron brochetas de carne de oso y verduras, pero la carne estaba poco cocida.
SÍNTOMAS Y DIAGNÓSTICO
Seis días después, un hombre de 29 años fue hospitalizado con fiebre, dolores musculares, hinchazón alrededor de los ojos y un recuento alto de glóbulos blancos.
Tras una segunda hospitalización, se identificó el consumo de carne de oso como la causa y se le trató con albendazol para la triquinelosis, una enfermedad causada por gusanos redondos.
PELIGROS Y PREVENCIÓN
La carne de oso congelada puede contener larvas de Trichinella, que son resistentes a la congelación y pueden provocar infecciones graves.
Los gusanos pueden afectar el corazón y el cerebro, formando quistes que pueden causar convulsiones.
Según los CDC, hasta el 24% de los osos negros en Canadá y Alaska pueden estar infectados con Trichinella nativa.
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