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Cristina mató a su hija Yaiza, de cuatro años, el 31 de mayo de 2021 en Sant Joan Despí, Barcelona, para vengarse de su ex pareja Sergio.
La mujer de 38 años fue sentenciada a prisión permanente revisable por asesinato con alevosía.
El jurado descartó que Cristina padeciera trastornos mentales o actuara por miedo insuperable, como argumentó su defensa.
MOTIVO Y PLANIFICACIÓN
Desde marzo de 2021, Cristina intentó volver con Sergio, quien la rechazó repetidamente.
Este rechazo provocó en ella un estado de creciente rabia y frustración, llevándola a planificar meticulosamente el asesinato de su hija.
Cristina investigó en su celular sobre el suicidio y la muerte de menores, suministró sedantes a Yaiza y luego la asfixió.
Las cartas de despedida encontradas en el lugar del crimen revelaron su intención de causar el mayor sufrimiento posible a Sergio.
SENTENCIA Y MEDIDAS ADICIONALES
Cristina fue encontrada con las facultades mentales inalteradas durante el crimen.
La sentencia incluye prohibiciones de acercamiento y comunicación con la familia paterna de la menor, una indemnización de 250 mil euros al padre y 75 mil euros a cada abuelo.
La resolución destacó que el objetivo de Cristina era infligir un daño psicológico irreparable a Sergio, no solo matando a su hija, sino también culpándolo por su muerte y el intento de suicidio fallido de ella misma.
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