Rogelio Rodríguez Mendoza
Cd. Victoria, Tam.-
A pesar del impacto que genera en la industria de la construcción, la Capital de Tamaulipas suma ya casi diez meses padeciendo escasez de grava y arena debido a que las pedreras siguen clausuradas.
La situación ha propiciado, además, el encarecimiento de los materiales para construcción.
“El camión de siete metros de grava y arena se ha encarecido hasta en un 40 o 50 por ciento. Se está vendiendo hasta en cinco mil pesos, cuando hasta hace poco menos de un año costaba tres mil pesos”, explicó un empresario constructor.
Otro sector que también resiente los efectos del desabasto son los camioneros, porque ahora tardan hasta tres o cuatro días para poder conseguir un camión de arena, cuando antes vendían hasta tres o cuatro camiones al día.
“Ahora tenemos que ir a hacer fila a la única pedrera que está operando para lograr sacar un viaje. Lo que va a suceder es que muchos vamos a terminar dejando la actividad por incosteable”, explicó Marcos Juárez, un camionero con más de 20 años en la actividad.
Tanto empresarios como camioneros siguen responsabilizando de la situación a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), porque ha obstaculizado la reapertura de las pedreras que venían operando en la entidad y que abastecían los materiales de construcción.
“Si como dicen había pedreras que operaban ilegalmente la lógica indica que deberían sancionarlas, pero a la vez facilitarles el cumplimiento de los requisitos legales para que vuelvan a operar. Pero no. Les están poniendo tantos obstáculos como si quisieran que nunca volvieran a abrir, cuando en realidad es una necesidad para la industria de la construcción”, refirió el empresario Alejandro de la Rosa.
