CIUDAD DE MÉXICO, agosto 08, (Agencias)
El pasado miércoles 24 de julio, Ángela Aguilar y Christian Nodal se dieron el “Sí acepto” en una pequeña y muy íntima boda civil en una hacienda de Cuernavaca, Morelos.
La cantante ha mostrado el afecto que le tiene a su abuela Flor Silvestre en muchas de sus presentaciones y durante su boda no podría ser una excepción. Ángela hizo un pequeño homenaje a la actriz y cantante usando sus joyas e, incluso, un vestido muy parecido al que su abuela utilizó el día de su boda.
Los aretes que Ángela llevó son parte de la herencia de su abuela y los ha llevado en momentos muy importantes de su vida, al grado de que ya se ha vuelto tradición llevarlos como un amuleto de la suerte.
Estos aretes, hechos de plata y aguamarina, los usó cuando se presentó en la octava edición del Premio Iberoamericano de Mecenazgo, en Madrid. En esa ocasión coincidió con la reina Sofía.
Esos mismos aretes también fuero parte de su outfit en los Grammys 2019 y, ahora, también los llevó en uno de los días más felices de su vida; la cantante quería una boda con un estilo muy tradicional y detalles vintages.
Desde la hacienda, la decoración y por supuesto el vestido que, aunque se había rumorado que era el de su abuela, en realidad, se trata de la colección No.4 de la exclusiva marca Berta Privée, todo fue justo al gusto de la pareja de enamorados.
Actualmente, esta línea de la marca va en la colección No. 12. A pesar de que no se trata de una prenda de archivo, el vestido tiene elementos que evocan a lo vintage, como lo son los olanes, el encaje chantilly, el cuello alto y las mangas que terminan con un plisado.
Los vestidos de novia de Berta Privé van desde los seis mil euros, un aproximado de 120 mil pesos mexicanos. Aunque en diversas plataformas en línea no tardaron en aparecer “réplicas” del mismo modelo con un pecio mucho menor.
¿Cómo sería el vestido ideal para tu boda?