Patricia Azuara
Cd. Victoria, Tam.-
Las carencias y deficiencias en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) parecen no tener fin; un servicio plagado de irregularidades que pone en riesgo a los pacientes se presenta día con día en la Capital de Tamaulipas.
Desde el elevador descompuesto hasta falta de medicamentos para combatir las principales enfermedades, como diabetes, hipertensión y problemas cardíacos, que afectan a un importante porcentaje de tamaulipecos.
Usuarios e incluso personal de la clínica que prefieren omitir sus generales, confirmaron a este medio de comunicación, el viacrucis que enfrentan en cada cita, y peor aún si se requiere hospitalización.
“Como derechohabientes del IMSS hemos sufrido el desabasto en medicamentos, principalmente en los que son de control de enfermedades crónicas, como la diabetes e hipertensión, y no se diga los que son para los pacientes que padecen del corazón”.
CRÓNICA DE UN DÍA EN UN HOSPITAL
Para un derechohabiente, un día de cita en alguna clínica de Tamaulipas, principalmente en las llamadas del IMSS-Bienestar, es toda una odisea.
Desde el primer momento que pisan en lugar, hasta su salida, es un caos por la falta de atención, de un lugar adecuado para esperar y, sobre todo, la mala atención del personal hace que el día sea un caos por donde se les quiera ver.
Techos húmedos, plafones a punto de caer; personal platicando; escritorios llenos de papeles; consultorios en mal estado; inmobiliario viejo y una serie de carencias son las que se viven diariamente en estos lugares.
Los propios usuarios aseguraron que en el tema de programación de las citas ya sea con el médico familiar, el especialista o trasladados a otras clínicas del país, llegan a tardar hasta seis meses; siempre argumentan agenda está llena.
Otra problemática que existe y que también representa un riesgo para los pacientes es que no funcionan los elevadores y parte de la infraestructura ya presenta deficiencias por la falta de rehabilitación.
“Otra problemática que existe y con un riesgo para los pacientes es que no funcionan los elevadores y a unos hasta el piso se sume, y cuando no funcionan suben a los pacientes por las escaleras corriendo el riesgo de que ocurra un accidente”.
Las áreas de consulta externa, así como hospitalización, se encuentran muy sucias y en abandono, hay unos tramos del techo que se mojan y está en riesgo de que se desprenda el plafón.
LAS CARENCIAS
La lista de déficit continúa, y los problemas parecen no tener fin, en tanto el derechohabiente continúa pagando lo que corresponde por servicio sumamente deficiente.
“La programación de las citas para las cirugías son muy retardadas, porque dicen que sólo hay un quirófano y si hay una urgencia se suspenden las demás y se tiene que reprogramar la cirugía y en ocasiones se vuelven a realizar los análisis que se solicitan y es más retrasado”.
No se digan los servicios de urgencias, ahí sí está mucho más crítica la situación, ya que los pacientes están en las camillas, silla de ruedas e incluso en el piso, en los pasillos y eso es muy incómodo.
“El trato al personal y a uno como derechohabientes, como si uno le pidiera favores, ni caso nos hacen, más enojado sale uno y sin resolver ninguna cita ni ningún trámite administrativo”.
“También con uno si llevamos a un familiar en muletas o en silla de ruedas o de la tercera edad, no podemos estacionarnos en un lugar cerca a la entrada por falta de cajones para especiales, sólo hay un espacio de discapacitados y es ocupado por los mismos que tienen puestos ambulantes”.
Requieren por lo menos cuatro cajones para minusválidos frente a la explanada del hospital para ascenso y descenso de pacientes. Espera que las autoridades tomen cartas en el asunto para darle solución a todas las problemáticas.
☀️ También puede interesarte:
