Lic. Ernesto Lerma
Esta es una película de producción menor con una aventura pequeña y directa en su concepción, que encuentra sus mejores momentos cuando deja que sea la acción la que exprese los conflictos de los personajes, porque es llamativo cómo a algunos de las estrellas del Universo Cinemático de Marvel, por fuera de esa franquicia, les cuesta una enormidad consolidar una trayectoria exitosa propia.
Anthony Mackie es uno de ellos: ahí tenemos el fracaso estrepitoso de “Criaturas: línea de extinción” (recaudó apenas algo más de tres millones de dólares en todo el mundo), que la verdad que merecía mejor suerte. Es que el filme de George Nolfi (el mismo de la interesante “Los agentes del destino”) es pequeño y conciso en su planteo y despliegue, y apela a una narración clásica que solo en algunos pasajes cae en remarcaciones innecesarias.
En apenas un minuto, con la pantalla en negro y una voz over, “Criaturas: línea de extinción” consigue presentar su escenario apocalíptico. Así nos enteramos de que, de repente, unas criaturas (valga la redundancia con la traducción del título original, el mucho más ambiguo “Elevation”) surgieron de debajo de la tierra y aniquilaron a la mayoría de la población. Los humanos no tuvieron forma de detenerlas: las balas y misiles probaron ser inútiles, y la única manera de eludirlas consistió en refugiarse en lugares que estén a más de 2400 metros por encima del nivel mar.
Tres años después, un hombre viudo (Mackie) se une con una física (Morena Baccarin) y una amiga del refugio donde sobrevive (Maddie Hasson) para una misión casi suicida: ir hasta una locación ubicada dentro del rango de acción de las criaturas para conseguir un suministro que le permita prolongar la vida de su hijo enfermo. Apenas pasan veinte minutos y ya la película ha puesto en el camino a sus protagonistas, que a partir de ahí emprenden una aventura que tiene componentes íntimos y globales. Es que, si el objetivo principal es que ese padre pueda salvar a su hijo, también está la posibilidad de encontrar la forma de hacer vulnerables a las fuerzas invasoras, que llamativamente solo se ocupan de cazar humanos.
“Criaturas: línea de extinción” no da muchas vueltas y, con pocos recursos, cuenta lo que tiene que contar, haciendo foco en esos tres personajes repletos de dudas, miedos, unos cuantos remordimientos y algunas convicciones, que son más morales que prácticas. En el fondo, lo que vemos es un drama sobre gente lidiando con los fantasmas de sus pasados y con un paisaje que antes era amigable, pero que ha pasado a ser letal. La película se hace cargo de esto y avanza casi sin pausa, dejando que sea la acción la que hable antes que las palabras. Precisamente, lo mejor del filme está en los pasajes donde es la sensación de peligro la que conduce la narración y no algunos diálogos que subrayan un poco en exceso las tensiones entre los personajes.
Cuando quiere ser algo más (como en el final), “Criaturas: línea de extinción” tropieza un poco, aunque sin descarrilar. En cambio, cuando es humilde y se asume pequeña, pero clásica y directa, es una aventura más que digna, que nos hace acordar a las posibilidades de la segunda línea de Hollywood, esa que a veces nos da más alegrías que los grandes blockbusters. La cinta relata el modo de vida de una sociedad acechada por los “segadores”, una especie de monstruos que, un día, salieron del área subterránea de la tierra, creando socavones. Resulta que estas bestias comienzan a cazar a los humanos, llenándolos de terror.
Mi ocho de calificación a esta más que buena cinta para todos los amantes de las películas con seres aterradores, llegó un nuevo título que promete dejar a todos al borde del asiento. Tras su paso por importantes películas del Marvel Cinematic Universe, los actores y estrellas de cine hollywoodense Anthony Mackie y Morena Baccarin se encuentran para una aventura emocionante donde el futuro de muchos podría estar en riesgo en “Criaturas: Línea de extinción”. La historia en este largometraje nos lleva hasta las Montañas Rocosas. Aquí conoceremos a un padre soltero, quien lucha por sobrevivir en un mundo donde existen peligrosos monstruos de origen extraterrestre que deja la posibilidad de una secuela.