CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 20, (Agencias)
Tras la muerte de Silvia Pinal, última diva de la Época de Oro del cine mexicano, hace unos días se dio lectura oficial a su testamento, dándose a conocer a los herederos.
Pinal fue una reconocida actriz. Nació en Guaymas, Sonora, el 12 de septiembre de 1931. Sus padres fueron María Luisa Hidalgo Aguilar y Moisés Pasquel, a quien la actriz conoció hasta que tuvo once años.
Los herederos universales del testamento de la fallecida actriz son sus hijos: Luis Enrique Guzmán, Sylvia Pasquel y Alejandra Guzmán. Pinal tenía dos terrenos en renta, su lujosa casa del Pedregal y el cuadro que le pintó Diego Rivera entre sus posesiones más destacadas.
También dos terrenos que los renta a empresas para estacionamientos. El teatro Diego Rivera, el edificio Versalles y un departamento (mismo que le pertenece en porcentajes a sus hijos), situación similar a como quedó la casa del Pedregal de quien produjo “Mujer casos de la vida real”.
La primera parte es de Luis Enrique Guzmán, porque ahí vive, la segunda parte es de Sylvia Pasquel, mientras que la zona en la que vivió Silvia Pinal, hasta en sus últimos días, es para Alejandra Guzmán; la casa en Acapulco, los terrenos en Tequesquitengo, el departamento de Altavista y el departamento en Coyoacán son para los tres hijos repartidos en partes iguales.
Las cuatro nietas y las dos bisnietas de Silvia Pinal, entre ellas Stephanie Salas, Michelle Salas, Camila y Frida Sofía heredaron dinero, el cual también fue destinado a los hijos de la actriz. Respecto a las joyas, obras de arte y ropa, fueron dejadas en el testamento a sus hijos en partes iguales, mientras que Efigenia Ramos, tiene diez por ciento de estas pertenencias.