Alfredo Guevara / El Diario Mx
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Por abandono de sus funciones, no reportarse a sus jornadas de trabajo o indisciplina, por lo menos 500 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) han sido de baja en los dos últimos años.
Afortunadamente, las bajas no se han resentido en el compromiso de garantizar la seguridad a la población en los diferentes municipios de la entidad, toda vez que en ese mismo periodo se incorporaron mil elementos más a la fuerza policial, afirmó Marco Gallegos Galván.
El presidente de la Comisión de Seguridad Pública, Prevención y Reinserción Social, en el Congreso local, consideró que se trata de personas que posiblemente al dedicarse a la carrera policial, finalmente se dieron cuenta de que no era su profesión y por lo tanto, optaron por dedicarse a otra cosa.
Incluso, no descartó que por los riesgos que se corren en el ejercicio de sus funciones, al enfrentarse a delincuentes en general, optaron por ausentarse y ser dados de baja de la corporación, al menos mientras definen qué carrera o actividad realizar.
Admitió que, en algunas ocasiones, ante la ausencia de los elementos hubo necesidad de buscarlos o mandarlos llamar por parte de la Secretaría de Seguridad Pública para conocer los motivos por los que se habían ausentado, pero ya no se reportaron.
El legislador admitió la necesidad de establecer nuevos mecanismos para reclutar a los aspirantes a la carrera policial, para evitar que se den estos actos de indisciplina o abandono de sus funciones, toda vez que para la Secretaría de Seguridad Pública representa una pérdida económica y de tiempo en los procesos de capacitación y adiestramiento.
Recordó que la SSP siempre tiene necesidad de incorporar a más elementos, toda vez que requiere aumentar su fuerza policial, para tener más capacidad de reacción y presencia en los 43 municipios de la entidad.
Sin embargo, se necesita que quien pretenda ser parte de la Secretaría de Seguridad Pública, debe entender el compromiso que asume, asumir la responsabilidad y cumplir con sus obligaciones como servidores públicos para salvaguardar la integridad y garantizar la seguridad de la población, toda vez que para ello se les capacita y adiestra en su etapa de formación.