Patricia Azuara / El Diario Mx
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Una de las golosinas más conocidas y adictivas del planeta, tiene su día, para celebrar a lo grande! El 13 de enero se celebra el Día Mundial del Chicle, este dulce de origen mexicano que tomó fama en cada uno de los continentes.
Estudios revelan que entre los beneficios del chicle están: mejorar la concentración, limpiar los dientes, ayuda a vocalizar, hablar y respirar mejor, disminuye el estrés y aumenta la saciedad.
Estudios revelan que México es el segundo país consumidor de chicles a nivel mundial. En este sentido, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), señala que en el país se producen más de 92 mil toneladas de chicles anuales con un valor de mercado de poco más de 420 millones de dólares.
Por lo que el consumo promedio del mexicano es de los más altos en el mundo, sólo después de Estados Unidos. La goma de mascar es una de las golosinas favoritas de los mexicanos, se consumen anualmente 1.8 kilogramos per cápita de chicles.
El estudio detalla que, dentro de la categoría de dulces, el chicle, es el que tiene perspectivas mayores de crecimiento para los próximos años.
MUCHO CHICLE
Diversos indicadores también coinciden que los mexicanos consumen en promedio 2.5 pastillas de goma de mascar diariamente, y al menos tres de cada 10 personas compra chicles una vez al día, siendo por la tarde donde registra el mayor consumo (73 por ciento).
El nombre de chicle proviene de la palabra náhuatl tzictli. Desde la época precolombina se usó para nombrar a este polímero que se obtiene de la savia del Manilkara zapota, originario de la región mesoamericana.
El chicle está constituido de una goma base fabricada con un polímero neutro denominado acetato polivinílico. Tradicionalmente la materia prima se extraía de la savia de un árbol tropical llamado chiclero.
Algunas gomas de mascar están conformadas por más de la mitad de su peso en azúcar o glucosa, así como ablandadores, colorantes, saborizantes, humectantes o edulcorantes.
DATOS CURIOSOS
Chad Fell alcanzó el récord mundial de la pompa de chicle más grande del mundo, formando un globo de unos 50 centímetros al mascarlo.
En San Luis Obispo (California) el callejón conocido como «Bubblegum Alley» se convirtió en un destino turístico muy peculiar, ya que acumula chicles pegados en sus paredes desde la década de los años sesenta. Mide 21 metros de largo y 4 de alto.
En Singapur está prohibido mascar, fabricar o importar chicles desde el año 1992.
El primer chicle sin azúcar se creó en el año 1960.
El chicle es el único alimento que se mastica y no se traga.
Inicialmente se fabricaban chicles con sabores de regaliz y menta.
El chicle es también conocido como goma de mascar y, aunque no lo creas, la goma de mascar no es chicle.