Al menos 18 personas murieron tras una serie de devastadoras tormentas y tornados que azotaron varios estados en el sur y centro de Estados Unidos, informaron autoridades locales este sábado. La región continúa en alerta máxima ante la amenaza de fenómenos meteorológicos extremos que podrían seguir causando daños significativos durante las próximas horas.
El gobernador de Misisipi, Tate Reeves, señaló en redes sociales que se reportaron tornados en al menos seis condados durante la madrugada del sábado. Confirmó que tres personas fueron hospitalizadas y advirtió que «se espera que este número aumente». Reeves añadió que «más condiciones climáticas severas» afectarán al estado durante el día.
La situación es parte de un amplio sistema de tormentas que afecta desde la frontera canadiense hasta Texas, abarcando un área poblada por más de 100 millones de habitantes. El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) pronosticó vientos de hasta 130 km/h (80 mph), nevadas intensas en el norte y condiciones propicias para incendios forestales en el sur.
En Misuri, las autoridades confirmaron al menos 11 víctimas mortales relacionadas con las tormentas. El gobernador Mike Kehoe destacó la labor «incansable» de socorristas y voluntarios para enfrentar la emergencia.