Declan Rice dio el partido de su vida con dos golazos de tiro libre y dejó tambaleando al Real Madrid, vigente Campeón que necesita otra de sus épicas remontadas para levantarse del 3-0 que le endilgó este martes el Arsenal en la Ida de Cuartos de Final de la Champions League.
El Real Madrid presentó su mejor alineación posible, principalmente en la ofensiva, con Bellingham detrás de Rodrygo, Vinícius Júnior y Mbappé, pero no crearon muchas opciones.
Del otro lado, el Arsenal se mostraba también agresivo, pero tampoco pudo generar mucho peligro durante los primeros minutos en la portería que defendió Courtois.
La versatilidad de Vinícius le abrió alguna oportunidad, pero su mejor intento fue un disparo que salió demasiado cruzado, mientras Mbappé tuvo la mejor de todo el primer tiempo, pero resolvió mal cuando estuvo mano a mano con David Raya, al dispararle al cuerpo en el minuto 31.
El Arsenal respondió en el ocaso de los primeros 45 minutos, cuando Courtois atajó disparos consecutivos de Rice y Martinelli.
BOMBARDEO
Inició el segundo tiempo, y el Arsenal sorprendió al Real Madrid con un golazo de tiro libre de Declan Rice, quien metió un espectacular efecto al balón para superar la barrera por la derecha y logró meterlo pegado al poste, en el minuto 58.
El Emirates Stadium comenzó a cantar y provocó una atmósfera ideal que el Arsenal debía aprovechar, pues al Real Madrid pocas veces se le puede tener sometido.
Courtois volvió a salvar a los merengues con otra doble atajada, apoyado con un desvío de Alaba en tres disparos consecutivos. Rice volvió a amenazar y Bellingham despejó en la línea. El Real Madrid se sostenía gracias a una heroica defensa.
Pero no fue por mucho tiempo. En el minuto 70 se volvió a formar la barrera. Rice volvió a perfilarse, esta vez más cargado hacia la izquierda. No importó. El mediocampista inglés pateó con la misma magia y metió el balón más arriba, de una mayor distancia, pero con el mismo e impactante efecto para un doblete magnífico.
Sin capacidad de reacción, aturdido como boxeador a punto de ser noqueado, el Real Madrid recibió el 3-0 en contra en el 75, con un disparo raso de Mikel Merino tras un servicio desde la izquierda. Por si fuera poco, Camavinga se fue expulsado en tiempo agregado.
Jamás, según la historia del Real Madrid, el máximo ganador de la historia de la Champions, se le debe dar por muerto. Tal vez el 3-0 parezca ser suficiente, pero el Arsenal tendrá que jugar con mucha precaución en el Santiago Bernabéu la próxima semana para sentenciar su pase a Semifinales de la Champions.
