Staff ED
Altamira, Tamaulipas.- Altamira enfrenta una severa crisis hídrica que ha desencadenado protestas ciudadanas y paralizado actividades industriales.
La escasez de agua potable, agravada por la falta de lluvias y el descenso crítico en los niveles del sistema lagunario Champayán, ha llevado al gobierno municipal a implementar racionamientos que afectan tanto a la población como a las industrias locales.
En respuesta, residentes de diversas colonias han bloqueado vialidades exigiendo soluciones inmediatas.
En el fraccionamiento Haciendas, algunos vecinos intentaron perforar tuberías para obtener agua, lo que llevó a la intervención de la Guardia Estatal y a la detención de los responsables.
La crisis también ha impactado al sector industrial. Hasta la fecha, cinco plantas del corredor industrial de Altamira han detenido su producción debido al racionamiento de agua, generando pérdidas económicas significativas y preocupación por posibles despidos.
Ante esta situación, organizaciones civiles han solicitado a las autoridades priorizar el suministro de agua para el consumo humano sobre el uso industrial.
Representantes de diversas asociaciones acudieron a la Comisión de Derechos Humanos en Tampico para exigir restricciones en el uso del recurso por parte de industrias y Pemex, enfatizando el derecho al acceso al agua de la población.
Mientras tanto, autoridades locales trabajan en medidas emergentes para mitigar la crisis, incluyendo la reparación de infraestructuras y la distribución de agua mediante pipas.
Sin embargo, la falta de precipitaciones y el aumento en la demanda continúan exacerbando la situación, dejando a Altamira en una posición crítica frente al desabasto de agua.
JR
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