Alfredo Guevara
Tras haber sido derrotado 5 a 1 en la elección de Ayuntamiento de Reynosa, LUIS RENÉ CANTÚ “el cachorro” GALVÁN regresó a la presidencia del Comité Directivo Estatal del PAN.
Por vergüenza, debió quedarse en esa población fronteriza, pero prefirió seguir viviendo a costa de las prerrogativas que recibe el partido, ganando poco más de 64 mil pesos al mes como presidente, según la nómina en el CDE del PAN.
Su regreso no fue novedad, aunque hubo algunos como FRANCISCO JAVIER GARZA DE COSS, que le echaron porras al CDE, pero muchos no coincidieron cuando expuso que hubo avances en el trato y apertura del Comité al Consejo Estatal, ajá.
Uno de los puntos logrados por consejeros del PAN, fue el hecho de que liberaron la supuesta nómina, donde viene plasmado el salario neto mensual que recibe desde el presidente del CDE hasta el intendente, cuya diferencia entre uno y otro es de casi 60 mil pesos.
Desde luego que, en la supuesta nómina, quedó comprobado que están comprados poco más de diez votos en el Consejo Estatal del PAN de manera directa y alrededor de tres más con familiares de consejeros que, tema aparte, están como empleados del CDE.
En pocas palabras, hay entre 13 y 15 consejeros que avalan todo lo que sea propuesto al interior del Consejo estatal, así sea contraviniendo principios y doctrina del partido. Habría que ver sí, aparte de los consejeros maiceados, pudiera haber otros con los que se saque provecho económico.
Entre los consejeros que estuvieron vía zoom en la sesión del Consejo estatal, algunos consideraron que el retorno de LUIS RENÉ CANTÚ GALVÁN podría estar apegado a derecho, más no moralmente lícito, lo que se ha perdido en sus administraciones.
Algunos consejeros están fastidiados de la manera en que se administra el CDE y la ausencia de un verdadero liderazgo ante los cuadros del panismo en Tamaulipas, al que no se sometió “el cachorro” para hacerse cargo de un nuevo periodo.
En un balance de lo que se eroga mensualmente, se observa una nómina por demás abultada y más, cuando hay varios secretarios que simple y sencillamente no hacen nada, pero que perciben un salario de hasta 37 mil pesos, como el que gana el que ocupa la de comunicación social.
En tesorería hay por lo menos diez, siete de los cuales, supuestamente atienden a los municipios y en donde el titular gana más de 49 mil pesos, casi lo mismo que quien se ostenta como secretario general. En fin.
