Eleazar Ávila
Ni se estresen, es lo normal de estos días cuando quedan 14, para que concluya el proselitismo y 17 para la víspera previa a la elección del día 2 de junio, y claro, que lo natural es que los ataques de ansiedad aumenten exponencialmente.
Lo hemos dicho demasiadas veces, está en juego el futuro de la República Mexicana. Casi 20 mil posiciones, senado, diputación federal, y en caso de Tamaulipas, 43 alcaldías y el Congreso.
Y como lo ya no realizaste, no será, si no lo hiciste, bien de origen, algunos, gracias por participar. ¿Qué deben hacer los candidatos, todos? Prepararse para el Día D, más allá de las diatribas normales, que, mientras sean de saliva, todo correcto.
Que viva la paz y que la estridencia sea eso, solamente ruido, contraste, narrativas duras, obviamente rudas, porque en política nada puede ser blanco, porque no está en juego la regencia de un preescolar.
Nacionalmente, hablamos de un lonchecito de $9,066,045,800,000 y como hemos explicado muchas veces, todo lo que esté en el aire, lo que está a ras de suelo, abajo del suelo, es decir el subsuelo, minerales, petróleo, gas, además de playas, montañas, fronteras, como Nuevo Laredo, la más importante que está en juego comandada hoy por Carmen Lilia y peleada por Yahleel Abdala.
Con ese techo partimos, que, en pedacitos, por supuesto, que cada entidad tiene lo suyo y entre los que nos interesan, como dice la expresión, Tamaulipas tiene todo.
Por ello mismo, los ataques de ansiedad de participantes y abonados. De los que se quieren reelegir, o los que van por primera vez en la papeleta el Senado, a las diputaciones federales, las locales y las alcaldías.
Me decía un operador de los que más y mejor conozco. Un asunto es trabajar y ganar una elección para terceras personas, que te contratan o con quienes tienes compromiso profesional y una muy diferente, estar directo en la papeleta, es decir, aparecer como candidato.
Mientras, reiteramos no hay foco pequeño. De Laredo a la comunidad más modesta de Tamaulipas, todos importan. Claro que hay claves como Matamoros, la tierra de Mario López, la de Reynosa con Maki Ortíz (directamente de Shihuahua), la de Tampico, ahora con Chucho Nader, la de Altamira con Armando Martínez, la de Madero que tiene prestaba y ya se va, Adrián Oseguera para la llegada de Erasmo González y por supuesto, que la capital, donde están los tres poderes.
El poder ejecutivo con el Dr. Américo Villarreal Anaya, jefe político de Morena y la Cuarta Transformación en la entidad, quien por cierto está muy aplicado para abatir los incendios en la Sierra Madre.
Es el sitio, comanda el poder judicial, el magistrado David Cerda Zúñiga y el Congreso de la entidad, bajo el liderazgo de Úrsula Salazar; por estas fechas todo territorio ganar la diputación local del distrito norte de Tampico.
Y en el centro de todos, por naturaleza, la capital que tiene en su poder Morena quien va, frente al expresidente Óscar Almaraz del -PAN-.
Y en este contexto, los dos barriendo todo el territorio. Todo siempre con el apoyo del gobernador Américo Villareal, quien entregó 12 camiones y 12 pipas para la distribución de agua potable, además de tinacos para las familias que padecen de escasez de agua.
En la cancha de enfrente, Almaraz tiene el reto, cuando la estructura de gobierno y programas sociales federales votan.
Mientras tanto, tranquilos, que las narrativas están funcionando y más allá del contraste, queremos que le vaya bien a Tamaulipas y por supuesto a cada uno de los 43 municipios de la entidad.
Ese es el verdadero corazón de la sociedad. Como se lee desde los diccionarios. Son la “entidad local formada por los vecinos de un determinado territorio para gestionar autónomamente sus intereses comunes”.
Nostra política.- “Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia”: Jean-Paul Sartre.
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