Partidos de oposición al actual régimen se mantienen y se encuentran inconformes por el reparto de diputaciones y senadurías de representación proporcional que recientemente realizó el INE en México.
Los dirigentes del PAN y PRI, así como algunos ciudadanos y actores políticos entre ellos, la excandidata a la presidencia de México, Xóchitl Gálvez Ruíz han interpuesto impugnaciones y promovido juicios ciudadanos por la supuesta forma como se repartieron a los partidos políticos de Morena, Verde y del Trabajo las diputaciones federales y senadurías de representación proporcional.
Los inconformes han interpuesto ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación recursos legales para que se revoque el acuerdo del Consejo General del Instituto con el que se distribuyeron el mayor número de lugares en la Cámara de Diputados a Morena y partidos aliados, lo que consideran irregular.
La oposición considera que no hay pluralidad y no se respeta la decisión del electorado al existir sobrerrepresentación, pero se deben de reconocer las victorias y triunfos y aceptar el fracaso en las urnas, hoy se magnifica para algunos el éxito electoral, unos partidos crecen y otros se encuentran en vísperas de desaparecer.
Hoy debemos entender cómo se vive y se encuentra el sistema político en el país, el cual por años ha transitado entre impugnaciones, reclamos, protestas y otras prácticas políticas que poco ayudan a promover y ejercer la democracia, incurridas por diversas personalidades, militantes y actores que de la noche a la mañana cambian de partido y con gran facilidad ingresan a otro, propiciado por múltiples conflictos, series de inconformidades, inmensas divisiones, las crisis y fracturas que surgen y otras que se mantienen activas al interior de las cúpulas de poder que conforman los diversos organismos partidistas en México.
El transfuguismo, también se presenta por ambición, codicia, deslealtad de actores políticos que cambian de partido para obtener un fin determinado, lo que ya forma parte de hacer política en el país.
Para muchos estas formas rentables de negociar, les otorga y contribuye a obtener poder y posiciones, ya quedo registrado en las pasadas elecciones locales y federales del dos de junio, en la que muchos priistas, algunos panistas y otros políticos de oposición renunciaron a sus militancias para adherirse y contender por Morena y partidos aliados a cargos de elección popular.
Hoy esta práctica está vigente y presente en varios estados, municipios y distritos en la que, en gran medida se pretende consolidar una clase política del partido hegemónico.
Un partido hegemónico es aquel con mayoría y que, trabaja en mantener el poder después de que concluye o se mantiene en riesgo su hegemonía.
Cabe destacar, que no todo partido mayoritario es hegemónico, en algunos casos se presentan y se registran fuerzas políticas dominantes, que trabajan y realizan una alternación de poder con otros partidos o en coaliciones.
La sobrerrepresentación es un tema actual y latente hoy en México, durante los meses de septiembre y octubre estos temas serán más discutidos y tratados, y no sólo el poder mayoritario se pudiera registrar en el Congreso de la Unión, sino también en los congresos locales, ayuntamientos y Senado de la República.
Los diversos partidos políticos con poder en sus municipios, estados y poderes legislativos tendrán que negociar para sacar, aprobar y obtener presupuestos y beneficios que les permita ejercer sus políticas y funciones públicas sin limitaciones.
Hoy el partido guinda y los que conforman la alianza “Sigamos Haciendo Historia”, son los más beneficiados de la descomposición que viven y presentan los partidos de oposición en México.
Algunos triunfos de Morena y coalición “Sigamos Haciendo Historia” del pasado proceso electoral de dos de junio, hoy los mantiene en la cima del poder político en 24 entidades, cientos de municipios y distritos por el transfuguismo de algunos políticos que les dieron victorias.
El transfuguismo constituye la consecuencia de las limitaciones democráticas de cualquier sistema político, ante la falta de pluralidad, veracidad, disciplina, credibilidad de los partidos políticos y la alta inconstancia o inestabilidad electoral.
En México ya es considerada una práctica común, de que un político se convierta en un candidato fuerte y rentable y que en días cambie a un partido diferente de aquel que lo postuló inicialmente, simplemente el “chapulineo”.
La inestabilidad y la corta esperanza de existencia de algunos partidos políticos, hace que estos y las coaliciones más exitosas logren mantener mayoría de alcaldía, gubernaturas y bancadas y se conviertan en patrón de migración después de las elecciones, cuando diputados se cambian de bancada dejando a sus propios bloques debilitados y con menos recursos, propiciando así la posible desaparición de partidos más pequeños.
Los líderes políticos pueden usar a los legisladores tránsfugas como piezas estratégicas para conseguir mayorías y dominar la agenda legislativa.
De igual forma, pareciera que el transfuguismo que sucede a nivel municipal, no es considerado más representativo o impactante debido que el voto es de manera personal y en algunos casos no en bancada como el de tipo legislativo.
Es común que una figura prominente en un partido, sea seguido por un grupo de legisladores que le guardan lealtad para integrarse a otro bloque o crear uno nuevo.
Caso concreto ya se está registrando con los movimientos políticos que se están realizando en las últimas horas, como los senadores electos por Michoacán y Tabasco, Araceli Saucedo Reyes y José Sabino Herrera Dagdug, quienes participaron por la coalición política “Fuerza y Corazón por México”, postulados por los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI).
Con ello la fracción parlamentaria de Morena en la LXVI Legislatura del Senado de la República que iniciará funciones el próximo domingo 1 de septiembre, sólo estará a un legislador para mantener mayoría calificada.
En los diversos cambios y modificaciones a la Constitución que hoy se tratan, legisladores de oposición PRI, PAN y Movimiento Ciudadano pudieran hacerse aliados de Morena para aprobar las reformas que se plantean, se encuentran en análisis y discusión.
En los meses de septiembre y octubre próximo estas prácticas se volverán a ver y presentar en congresos locales, ayuntamientos, Cámara de Diputados y Senado de la República.
Por lo pronto hace unas horas, en una decisión histórica de los magistrados que conforman el Tribunal Federal Electoral del Poder Judicial de la Federación aprobaron con cuatro votos a favor y uno, la mayoría calificada de Morena y partidos aliados para el Congreso de la Unión con 364 curules.
Así las cosas…
Y Usted, ¿qué opina?
Nos vemos a la próxima.