Aunque los autores del estancamiento y la destrucción andan en plena campaña de noticias falsas, pretendiendo compararse con el gobierno actual, a fuerza de los hechos verdaderos sigue golpeándoles en el rostro.
A cada infundio endosando culpas a Morena, sus gobiernos y personajes, invariablemente a la oposición le ha resultado que, en su tiempo, ellos cometieron cosas peores, auténticas, no fabricadas para el spot, como se les hizo costumbre.
La mayoría de los crímenes cometidos por el Estado en el pasado gobierno panista tamaulipeco son de sobra conocidos, como del dominio público se volvió también el trato que le dieron a cada caso.
Primero el ocultamiento, luego la distorsión de los hechos, la revictimización de las víctimas, la fábrica de responsables de paja, el encarcelamiento de inocentes, la muerte de algunos de ellos y hasta la promoción de los responsables para asignarles tareas delincuenciales al servicio de la familia gobernante.
Fue la constante en el pasado gobierno, que llegó a considerarse el cártel de cárteles, comandado por FRANCISCO JAVIER “GCV”.
Apostando a la amnesia colectiva, los polvos de aquellos lodos ahora andan entogados, como jueces de horca y cuchillo, condenando el vuelo de la libélula.
Andan como el tío Lolo -decían en el barrio-, haciéndole al pendejo solo.
El otro rostro de la moneda se vio ayer, al tenor del posicionamiento que salió a dar el secretario general de Gobierno, HÉCTOR JOEL VILLEGAS GONZÁLEZ, respecto de la muerte violenta del joven PEDRO ISRAEL MALPICA DOMÍNGUEZ, a finales del año pasado, en Reynosa.
¿Qué se hizo?
En primer lugar, se reconoció la participación en los hechos de ocho elementos de la Policía Estatal, todos dados de baja de inmediato, uno encarcelado como presunto autor material del disparo, otros seis sujetos a medidas cautelares para evitar su evasión durante el deslinde de responsabilidades y la liberación de una orden de aprehensión en contra de un octavo, prófugo.
En seguida, se dio cuenta de todas las acciones de apoyo para los deudos, acompañando el Estado su lucha por la impartición de justicia.
La aplicación de un protocolo integral de atención, por instrucciones directas del gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, con asistencia psicológica y asesoría jurídica especializada a través de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas.
Finalmente, y acaso lo más trascendente, se limpió la imagen del fallecido, como un joven de buena conducta y honorable, por lo que es recordado.
Ello, entre el lamento y pesar institucional, la disculpa pública, por el actuar fuera de orden de los protagonistas del crimen, garantizando llevar el proceso hasta sus últimas consecuencias.
No hay dolor más grande para una madre que perder a un hijo; que sea de manera violenta y en el descrédito, como, insisto, se acostumbró en el pasado reciente, sigue resultando inimaginable, al momento y en las consecuencias.
Hoy, una madre, con todo su dolor a cuestas, ganó una batalla al reivindicar la imagen de su hijo caído; la esperanza, la confianza está porque la justicia sea completa, pronta y expedita para castigar a los criminales.
Cuando en su comparecencia, ayer, el secretario VILLEGAS en nombre del Gobernador extendió las garantías de la transformación ética en el gobierno, lo hizo acompañar de las muestras de cero tolerancia y cero impunidad contra los violentadores de la ley desde el servicio público.
“No vamos a solapar a nadie -dijo VILLEGAS en nombre del Ejecutivo-.
“No toleraremos abusos, faltas, ni atropellos, por parte de los elementos de las fuerzas de seguridad, ni de ningún servidor público del Estado” y la convicción colectiva es que así es y así será.
La transparencia, la honestidad y el respeto irrestricto a la dignidad humana, como premisas del gobierno del doctor AMÉRICO, soportan el andamiaje institucional bajo un perfil de justicia y confiabilidad.
Las incongruencias están en frente.
Con ganas de reflectores, ayer representantes del PRI y Movimiento Ciudadano también dictaron sendas conferencias de prensa en Victoria Capital, pero con desafortunadas declaraciones que no soportan el menor tamiz de la lógica.
Para MC criticar que diputadas de la bancada del Verde se fueran a Morena es como echar tierrita al tránsito que del PRI a su partido recientemente se hizo en el Cabildo victorense.
Y del PRI ¿qué les digo?… ¿aún existe?
Están desaprovechando el último capital que les queda.
Deberían rentar el estacionamiento para completar el pago de “los billes”.