Desde que inició el gobierno de Américo Villarreal Anaya, una y otra vez la consejera jurídica Tania Contreras, nos hizo notar que habían interpuesto más de una denuncia en contra de servidores públicos por el mal uso del dinero público. Fueron tantas veces que lo hizo, que llegue a pensar que estaba arando en el desierto: no se veía avance por ningún lado. Ahora la Auditoría Superior del Estado anuncia que presentó 40 denuncias ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción. Me pregunto: ¿habrá castigo para los presuntos responsables?
No es de hoy, si no de siempre, que se hace notar el contubernio entre autoridades, policiacas y juzgadores con presuntos malos servidores públicos. Se habla de impunidad, de contubernio o complicidad, de tal suerte que los malos servidores públicos, hagan de cuenta, se burlan de la ley. ¿Estamos, de nueva cuenta, ante un escenario de complicidades institucionales? Yo, espero que no, porque Morena tiene que hacer valer sus principios de no robar, no mentir ni engañar al pueblo… menos cuando se es parte del poder.
ABUNDANCIA
¿Por qué roban los servidores públicos? ¿Por qué se aprovechan del cargo para enriquecerse? Y parece mentira, pero es la cultura que siempre ha imperado: el servidor público se servía del presupuesto, al grado que hasta la sirvienta o el jardinero lo tenía en la nómina, eso, era lo menos. Lo más es que, aprovechándose del cargo, trafica con el poder de asignar contratos o concesiones… y, entre uno y otro, le daba una gran tajada al presupuesto a su cargo. Por eso, para muchos, vivir fuera del presupuesto era un error.
No llenan, es lo que dice la voz del pueblo. Y efectivamente, aun recordamos como Karime Macías, allá en Veracruz, en sus anotaciones en una libreta llenó páginas con la expresión: “merezco abundancia” y agarró, junto con su esposo el gobernador, todo lo que pudieron. Claro, al final, el exgobernador terminó en la cárcel y ella huyendo del país. Me pregunto: ¿Cómo ellos cuántos nos dejarán quienes actualmente ostentan el poder? En reportajes se ha documentado como servidores públicos, traficando influencias, ya disponen de casas, ranchos y departamentos hasta en el extranjero.
PELOS Y SEÑALES
La nota de la semana, además de que Padilla cumple 276 años de fundada, es la que da la Auditoria Superior del Estado, en el sentido de que emitió mas de 40 denuncias penales en contra de exalcaldes, exfuncionarios municipales y titulares de organismos descentralizados. Refiere la ASE que hicieron mal uso de 600 millones de pesos y, al poner las 40 o mas denuncias, ya hizo su trabajo, ahora corresponde a la Fiscalía Anticorrupción integrar las averiguaciones de tal suerte que los jueces puedan emitir las correspondientes órdenes de aprehensión.
Al poner nombres a cada una de las denuncias, que ya se hicieron públicas, nos damos cuenta cómo el pueblo se ha equivocado una y otra vez; que sean alcaldes, significa que ganaron una elección, que se aprovecharon de la confianza que el pueblo les confió. En fin, en este momento ya se conoce nombres de exalcaldes, de exfuncionarios que, de ser ciertas las acusaciones, tendrán que ser sancionados.
RENDICIÓN DE CUENTAS Y OPACIDAD
Morena tiene como principios básicos: no robar, no traicionar y no engañar al pueblo. Y basta, vamos pues, sus principios para dar por hecho que los cumplen. Al menos así se interpreta que AMLO, como primer presidente de la 4T, y ahora Claudia Sheinbaum, eliminen a las instituciones responsables de cuidar la rendición de cuentas y evitar la opacidad. Bien lo dicen, hay que empezar por la casa, para dar el ejemplo: y en Morena lo menos que hacen es rendir cuentas y ser transparentes.
Al menos es lo que infiere de las acusaciones que lanza Tomás Sánchez Lara, consejero de Morena, puesto que hace notar que en su partido “la transparencia es la queja de la militancia, después de que no hay informe de las economías del partido”. Si el partido no cumple, menos pues, lo hará el gobierno emanado de ese partido. Al menos es lo que se observa a nivel nacional; no todos están de acuerdo en la pobreza franciscana. Y lo que sucede, actualmente en Tamaulipas, es precisamente consecuencia de que el gobierno anterior fue opaco y no hubo transparencia en su rendición de cuentas… por lo pronto la ASE indica que hay mas de 600 millones de pesos bailando, o que ya bailaron, y quieren castigar a los culpables.