Rogelio Rodríguez Mendoza
SIGUEN ATRAPADOS.- Está a punto de terminar el año y sigue sin verse cómo los magistrados del Tribunal Electoral de Tamaulipas, (Trieltam), puedan hallar la salida de la trampa en que están atrapados con respecto a la definición del presidente de la máxima instancia estatal en materia electoral.
Como ya se ha dicho, el gran problema es que todos quieren la silla que dejó vacía el desaforado magistrado, Edgar Danés Rojas, y unos a otros se están boicoteando, sin importarles que con ello tengan paralizada la impartición de justicia electoral porque hay asuntos esperando resolución.
Blanca Eladia Hernández Rojas, insiste en que por ley le corresponde ocupar la presidencia, pero su conflicto personal con, René Osiris Sánchez Rivas y Edgar Iván Arroyo Villarreal, le impide obtener los votos necesarios para ello, y lo mismo ocurre con sus otros dos compañeros porque también andan enemistados entre ellos.
La cuarta integrante del Pleno, Gloria Graciela Reyna Hagelsieb, no tiene la mínima posibilidad de ocupar la presidencia, porque fue designada magistrada por ministerio de ley y no por el Senado de la República. Recibió el encargo por ocho meses, pero ya lleva tres años cobrando como jueza electoral.
Nos dicen que la solución la tienen en la Secretaría General de Gobierno, pero pareciera que han minimizado el asunto, lo que revela que no alcanzan a visualizar el verdadero tamaño del problema, sobre todo porque ya está en marcha el proceso electoral de jueces y magistrados del Poder Judicial del Estado.
¿PODRÁ?.- A propósito de magistrados, Hernán de la Garza Tamez, no la tendrá nada fácil en los poco más de ocho meses que estará al frente de la presidencia del Poder Judicial del Estado.
Sobre todo, porque salvo él, el resto de los magistrados del Supremo Tribunal de Justicia son afines al exgobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, el principal adversario político del gobierno en turno.
¿Serán capaces los magistrados de resolver con imparcialidad los procesos penales contra excabecistas que les lleguen en apelación? La verdad, por más que digan lo contrario, resulta difícil de creer que no les temblará la mano al momento de emitir sus resoluciones.
Dicho en otras palabras, el magistrado presidente está literalmente solo, por más que el resto de sus pares le hayan dado el voto para que asumiera el cargo.
A favor del nuevo presidente hay que decir que lo respalda su amplia trayectoria en el ejercicio del Derecho, y es hijo de uno de los más respetados titulares que ha tenido el Poder Judicial, Don Humberto de la Garza Kelly.
Esa trayectoria le ha valido el respeto de la mayor parte de los trabajadores del Poder Judicial, comenzando por los jueces y juezas.
Como quiera que sea, pronto veremos cuál será la línea de los magistrados, porque están por judicializarse un buen número de carpetas de investigación contra exservidores públicos vinculados al cabecismo.
Vale recordar que, todos los magistrados, incluyendo a De la Garza Tamez, renunciaron formalmente a su cargo con efectos al próximo 30 de septiembre, y al mismo tiempo declinaron participar como candidatos en la elección judicial a realizarse en junio del 2025.
DECEPCIONARON.- El pasado viernes terminó el primer periodo ordinario de sesiones de la 66 legislatura local, y ha quedado bastante claro que la oposición, entendida ésta como el PAN, PRI y Movimiento Ciudadano (MC), ha decepcionado.
Por su experiencia en el terreno legislativo, al haber formado parte del Congreso local o del Congreso de la Unión, se esperaba mucho de panistas como, Gerardo Peña Flores, Vicente Verástegui Ostos e Ismael García Cabeza de Vaca, pero con excepción del tercero, los demás están entregados por completo al partido en el poder.
Luego del fallido secuestro del que fue víctima, Verástegui apenas asistió a dos sesiones ordinarias, mientras que las participaciones de Peña Flores han sido intrascendentes y en los debates parece más un integrante del grupo parlamentario de Morena que coordinador de la bancada blanquiazul.
Por las mismas anda la priista, Mercedes del Carmen Guillén Vicente, quien está más ocupada en reclamar privilegios que en darle la batalla a Morena y sus aliados en aquellos asuntos donde la línea nacional de su partido es en contra.
Con todo ello, el morenista, Humberto Prieto Herrera, no tendrá problemas para rendir buenas cuentas al frente de la Junta de Gobierno. De hecho, es más probable que le den compliquen la tarea sus mismos compañeros, con sus ambiciones personales, que los legisladores de oposición.
ASI ANDAN LAS COSAS.