José Inés Figueroa Vitela.-
En la región más segura de México y el mundo entero, campea el
optimismo.
Más allá del gran chaparral y el pasto seco en rollo, donde la tierra se
abre pidiendo lluvia y los maíces ralos del último intento a nadie arredra,
estuvo este miércoles el Gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA y el
titular de Segalmex -agencia federal heredera de la Conasupo-, LEONEL
COTA MONTAÑO.
Fueron, consecuentes con la férrea voluntad de los tamaulipecos,
representados acá en todas sus más arraigadas fortalezas y tradiciones, por
los sancarlenses del mezcal, la picota, las carreras de caballos, el fideo
seco, el arroz y el cortadillo, el cerro del diente y la sierra chiquita.
Cuando vayas a San Carlos, un cercado paralelo de madera, para las
carreras parejeros de caballos, te dirá que ya llegaste; ahí no corrió El
Califa, pero su estampa campea sí, por todo el territorio, allende el tiempo y
las tierras de su dueño el doctor ANAYA, Médico muy afamado, nos
recuerda el corrido.
A la memoria de los ancestros de la estirpe materna, dedicó el
Mandatario tamaulipeco la jornada de media semana en esta tierra de
origen.
Desde acá, bajo carpas en la cabecera municipal que dieron sombra
a casi todo el pueblo e invitados de fuera, el alto funcionario federal se
refirió a los programas de leche de calidad y barata que se proponen
duplicar en cobertura -100 mil beneficiarios- al cerrar el año; las despensas
y el maíz que se proponen vender a bajo precio y por supuesto, las 6 mil
400 toneladas de fertilizantes, que entre 11 mil productores de maíz y frijol
iniciaron en su reparto aquí ahora.
AMÉRICO recordó que el Presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ
OBRADOR ya autorizó la construcción de una planta productora de
fertilizantes en el norte del Estado y se comprometió a comprar su
producción para repartirla entre los campesinos del país, iniciando con los
de casa y abundó que las gestiones van para que, como potencia
productora de energía, en el concierto nacional, Tamaulipas también reciba
consideraciones en el cobro del consumo domiciliario para sus habitantes.
Aplausos y vivas del respetable en los anuncios.
“Esos son los abrazos”, explicó el Gobernador, hablando de los
apoyos sociales institucionales, como complemento de las estrategias de
seguridad, sobre las que la Mesa para la Construcción de la Paz, instalada
aquí temprano, había repasado actualidad y prospectiva en la incidencia
delictiva.
Un viejón del pueblo, espontáneo, había tomado el micrófono, al final
de los discursos, cuando ya se servía “comida de boda” a todos los
presentes, para repasar el tránsito del temor y la zozobra, a convertirse en
el lugar más seguro de todo México… ¡y el mundo!
Dos sexenio atrás, aseguró, con la complicidad institucional, los
delincuentes se apoderaron del pueblo, saquearon los ranchos, sometieron
a las familias y terminaron con las actividades productivas.
Cuando ya estaba todo perdido, hicieron alianzas regionales, y con el
apoyo de la Columna Cívica Pedro José Méndez, lograron recuperar el
territorio y cerrarle el paso a las gavillas que los mantuvieron asolados por
un tiempo.
Luego llegó la Cuarta Transformación y con el gobernador AMÉRICO,
la policía estatal cambió, sumándose el apoyo del General Secretario de
Seguridad del Estado CHÁVEZ, consolidándose la tranquilidad: ya no hay
cobros de cuotas, secuestros, robos de ganado y tierras, la gente trabaja de
noche sus parcelas por las altas temperaturas del día, sin contratiempos.
Todo es producir, construir y convivir.
“Este gobierno está empeñado en que cada vez, los habitantes
tengan mejora en la percepción de miedo, de seguridad en la vida diaria y
en los quehaceres económicos y productivos; me da mucho gusto constatar
que hay zonas, con menos hechos delictivos. No ausentes, no bajamos la
guardia; estamos atentos y mejorando”, les había dicho el Mandatario
estatal.
“Estas Acciones son los abrazos del gobierno federal, atento de su
gente”, apuntó AVA y relacionó con el programa de fertilizantes, la atención
a los adultos mayores, el Sembrando Vida, las Becas para niños y jóvenes,
que son alternativa, para evitar seguir sufriendo los estragos que deja la
delincuencia.
Día de fiesta en San Carlos, el lugar que AMÉRICO lleva en el
corazón, el origen de muchas historias de su niñez, cuna de los ANAYA y
reflejo de todos los tamaulipecos.
En las faldas de la sierra chiquita, frente a la cabecera, por estos días
humea un incendio forestal de regulares dimensiones.
En el aparato público estatal, aun está pendiente la sujeción a los
rescoldos del pasado sexenal vergonzante, enquistado en los órganos
jurisdiccionales.
Así también lo asentaron los sancarlenses, reclamando la liberación
de CECILIA RAMÍREZ, otra de las presas políticas del cabecismo,
confinada para someter y vengarse de este pueblo.
Muchos avances y pocos pendientes.
Que no crezcan y se acaben de una vez los males.