La zona metropolitana del sur cumplió ampliamente las expectativas de los miles de visitantes que acudieron a Tampico para ser testigos del Tercer Informe del gobernador Américo Villarreal.
No hace falta rebuscar para encontrar las razones por las que Américo decidió sacar de Victoria el Tercer Informe de Gobierno. La zona sur es hoy por hoy la joya de la corona.
Sobre el mensaje de AVA a los tamaulipecos queda claro que la prioridad para el Gobierno del Estado es la política social y la atención a grupos vulnerables.
El aplauso más prolongado fue para el anuncio de la compra consolidada de medicamentos por más de 117 millones de pesos, lo que permitirá resurtir las farmacias de los hospitales estatales. Este ha sido el talón de Aquiles de los gobiernos desde hace ya casi una década.
La buena noticia es que a partir del mismo sábado comenzó la dispersión de medicamentos a los hospitales del Gobierno estatal. En el rubro de salud el Gobernador también destacó la compra de equipo de alta tecnología para el Centro de Oncología infantil y el progreso de las obras hospitalarias.
Las 16 ambulancias del Centro de Urgencias es otra buena noticia.
En lo político, las señales durante el informe fueron bastante claras: los alcaldes en rebeldía fueron invitados, pero no ocuparon lugares relevantes, mismo tema de los legisladores federales. Sobre todo dos de la frontera.
¿QUÉ COMUNICAS?
La respuesta de las autoridades municipales de Altamira, encabezados por el alcalde Armando Martínez, fueron un factor muy importante para proteger a la ciudadanía tras un fuerte incendio en uno de los corralones más grandes de la zona.
La rapidez con que se coordinaron las autoridades permitió la evacuación de las familias que viven en las zonas aledañas, dejando así un saldo blanco. Incluso el operativo de seguridad fue muy oportuno y pudo evitar la rapiña en las viviendas.
En este caso la comunicación jugó un papel muy importante, pues permitió desplegar el mayor número de elementos y recursos para controlar el siniestro.
POSDATA
En Matamoros la decepción de los ciudadanos poco a poco se vuelve más evidente. Y es que mientras la ciudad está sumida en las necesidades, el alcalde Beto Granados pierde el tiempo en trivialidades y conciertos.
