Rogelio Rodríguez Mendoza
EL CAMPO NO AGUANTA MÁS.- Más allá de que haya o no injerencias políticas en los bloqueos carreteros realizados por agricultores del norte del estado, una realidad innegable es que la política agropecuaria del gobierno federal no ha funcionado, y por lo tanto hay motivos para la protesta.
La federación descobijó por completo a la agricultura comercial para concentrar los apoyos en los productores del sector social, suponiendo que era lo mejor para el país, y a casi seis años de distancia las consecuencias están a la vista.
Hoy el campo, particularmente la agricultura, está enfrentando las consecuencias de esa fallida política agropecuaria.
En entidades como Tamaulipas la producción de granos cayó abismalmente; hay miles de hectáreas (se calculan en 100 mil) abandonadas porque sus dueños carecen de medios para sembrarlas; y cientos de familias tuvieron que migrar a las ciudades para poder subsistir. Por eso la desesperación de los campesinos.
Frente a ello, lo que sigue es esperar a que la próxima presidenta del país, sea Claudia Sheinbaum o Xóchitl Gálvez, no se vayan a volver a equivocar con el campo.
La agricultura, la ganadería, la pesca y todas las actividades del sector agropecuario, requieren, necesariamente, del apoyo subsidiario del gobierno, sobre todo viniendo de seis años de abandono total.
Ojalá y así sea. No se necesita mucha inteligencia para entender que el campo debe ser una prioridad de cualquier gobierno. El sector no aguantaría otro sexenio de abandono.
REVANCHISMO.- En la capital de Tamaulipas sigue sin resolverse el problema del desabasto de materiales de construcción.
Las pedreras más grandes, que venían abasteciendo de esos insumos a los constructores, continúan cerradas, originando, además del desabasto, el encarecimiento de grava y arena.
El impacto en la economía local es muy severo, pero eso no ha sido suficiente para que las autoridades agilicen una solución a corto plazo.
Compete a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, atender y resolver el problema, pero pareciera que la titular, Karina Lizeth Saldívar, no han hallado el camino político y legal para destrabarlo.
Lo curioso de todo es que, entre los constructores cada vez toma más fuerza la versión de que, el cierre de las pedreras obedeció más a un asunto de revanchismo que a un tema de legalidad.
Lamentablemente en este pleito quienes están pagando las consecuencias son los constructores y los mismos ciudadanos, porque el ncarecimiento de los materiales los terminan pagando los ciudadanos, con viviendas más caras.
BUEN SAMARITANO.- Ahora que el INE anunció que dará apoyo económico a los institutos electorales de Zacatecas, Guerrero y Morelos, para que puedan sacar adelante sus respectivas elecciones locales, no estaría mal que también el Instituto Electoral de Tamaulipas (Ietam), se acercará a tocar la puerta del árbitro electoral nacional.
Y es que, igual que aquellas tres entidades, Tamaulipas se encuentra en la misma situación de precariedad económica, o por lo menos eso ha dicho el consejero presidente del Ietam, Juan José Ramos Charre.
Desde diciembre pasado, cuando el Congreso del Estado redujo en casi 200 millones el proyecto de presupuesto del Ietam (le autorizó solamente 565 millones de pesos de los 756 que estaba solicitando), el presidente advirtió que ese recorte complicará la tarea del instituto para organizar eficazmente la elección del dos de junio.
Bajo esa circunstancia, ahora es cuando el Ietam debe aprovechar esa repentina actitud de buen samaritano del INE.
ASI ANDAN LAS COSAS.
