diciembre 11, 2024
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Ma. Teresa Medina Marroquín

El peligro de que les arda el alma, y otra cosa también

abril 30, 2024 | 237 vistas

Ma. Teresa Medina Marroquín

 

LOS DEMONIOS QUE APARECERÍAN CON EL GOLPE DE ESTADO TÉCNICO

Las invitaciones a los comentarios políticos están suscitando entre el pueblo de México, más allá de la polarización de la que acusan los neoliberales al presidente López Obrador, una serie de reacciones agresivas.

Cuidado con lo que está pasando. Porque a ese paso el proceso electoral del 2 de junio podría llegar no con simplones claroscuros sino con escenarios de guerra civil.

Y es que la realidad, como ya ocurre en Tamaulipas, con graves acusaciones que surgen, se dice, de la nada, y en las que los acusadores ya les empezó arder el alma, y quizá otra cosa, pues los del poder también los empezaron a acusar de haber cometido graves y diversos delitos.

Al pueblo igual le encanta lo que otras voces califican de cultura popular, cosa que yo no creo que sea así, pero que en realidad ignoran las trascendencias desde un Golpe de Estado Técnico, incluso llegando al extremo de que una potencia económica y militar vea la oportunidad de “hacerse presente” con sus marines, “sólo para ver cómo se puede apoyar a los mexicanos convertidos en unos salvajes incontrolables”.

 

YA ESTÁN LISTOS LOS PODEROSOS DE WALL STREET; NO DE MEDIO ORIENTE

¿Hasta ese nivel pueden llegar las cosas? Supongo que sí, cuando los gringos, heridos de muerte por chinos, rusos e indios, andan a la caza de riquezas que bien les pueden sacar de tantos apuros, pues deben el equivalente de todo el planeta, lo que es impagable, pero con México darían un magnífico abono a sus acreedores israelitas, no de los avecindados en Medio Oriente, sino de los que viven a sus anchas en la ciudad de Nueva York, expertos en especulaciones financieras de calados imponentes.

Expertos también en guerras, que exigen que sus inventarios se vacíen, pues se tiene el grave problema de que se desborde tanto armamento.

La meta es matar gente por todos lados. Para eso ya no son suficientes los movimientos de las llamadas “delincuencias organizadas”, tan salvajes o civilizadas según el nivel de cada país.

Como quiera, han de decir, al rato se vuelven a llenar de población; y al fin y al cabo se trata de México, no de Canadá, con quien se entienden muy bien pues parlan en buena medida el mismo idioma y descienden de las mismas razas.

 

CHOQUE DE TRENES: EL DINERO DE LOS NEOLIBERALES ¿Y LA CANCELACIÓN DE LAS PENSIONES?

Acá somos la raza de bronce, muy distintos a los “güeros” imperialistas. Raza de bronce tildada de sanguinaria, pero no es así, porque no pensamos tanto en matar gente, pero nos manipulan.

Y al caso la revelación es que después del segundo debate presidencial, y aquí olvídense del tal Máynez, enfoquémonos en que Xóchitl Gálvez anda bien alebrestada, y una Claudia Sheinbaum, que según trasciende, continúa puliendo sus estrategias electorales para el tercero, al verse el domingo en la noche un poquito limitada en sus respuestas, ante los ataques pandilleriles de su adversaria.

Si dicen que no habrá guerra antes y “más después” de las elecciones del 2 de junio, se duda. Los dinerales casi infinitos de los neoliberales contra el partido en el poder, sobre todo contra el nuevo equipo de Sheinbaum, es ya un choque de trenes.

El pendiente elevado a pánico de quienes perciben las tragedias, advierte de que la guerra lo destruirá todo. No sólo lo vinculado a los compromisos de campaña, sino a las causas de la gente que se siente “gente” por los apoyos que los sacaron de su condición de desposeídos.

Ahí volverá a explotar otra bomba de dimensiones inimaginables. Pues la disputa, al margen de las ambiciones transexenales, sería el descontrol. “Unos” que son muchos millones de mexicanos entrarán en pánico al regresar al reclamo doloroso de la desigualdad social. ¿Cancelarán pensiones?

Mientras que los otros, que no son más de 500 millonarios exigirán otra venta de país (¿cuál?), estilo Salinas de Gortari. Esto es, la traición del verdadero autoritarismo.

¡Feliz miércoles!

[email protected], @columnaorbe

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