La gran transformación que vive Tamaulipas, pasa, entre otros rostros, por una reforma integral del marco jurídico, reflejo de lo que a nivel nacional lidera la presidenta, CLAUDIA SHEINBAUM PARDO.
En la última sesión plenaria del Congreso local, el diputado ISIDRO VARGAS FERNÁNDEZ presentó la iniciativa para reformar la legislación estatal en materia electoral.
Con ello se está haciendo efectiva la propuesta presidencial de poner fin al nepotismo electoral y a las reelecciones de los propios legisladores, alcaldes e integrantes de los cabildos que gozaron de tal prerrogativa los últimos años.
La medida busca sanear los escenarios de participación política, donde la debilidad de los hombres y mujeres de poder, de eternizarse en los cargos, encontró cabida precisamente con el nepotismo y la reelección, desvirtuando el ejercicio del servicio público.
La expedición de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado, también propuesta en el acto y ayer dictaminada, hace una serie de definiciones, sobre la integración del nuevo Poder Judicial del Estado, que será electo en ya menos de semana y media.
Terminar con el despacho de la cuchara grande que se daban en este caso los Magistrados, pero que muy pronto alcanzará a Consejeros y otras figuras inventadas por el viejo sistema prianista para la complicidad y la impunidad, resulta fundamental en el gran proceso transformador que vivimos.
Así se cristaliza la advertencia de que nada de gobierno rico y pueblo pobre.
La misma reforma define las nuevas figuras del Poder Judicial con todas sus capacidades, como el Tribunal de Disciplina Judicial y anota las jurisdicciones y tiempos de ejercicio de los Magistrados que elegiremos en las urnas el próximo primero de junio.
Esta que es voluntad popular, en la representación por excelencia que concentran los diputados, se hará efectiva sobre otro mandato del pueblo, con los nuevos y nuevas juzgadoras, atrás de cuyo ejercicio también estará el voto ciudadano.
Los agoreros del desastre, nostálgicos del pasado de privilegios para unos cuantos, a costa de la inhibición de proyectos elementales de vida para las masas, siguen arreciando sus campañas negras y estrategias, tratando de impedir el proceso transformador.
Se van a quedar con las ganas, porque la elección de los nuevos juzgadores ya nadie la detiene y su acción primera, de sancionar a los saqueadores del pueblo, liderados aún, aquí y ahora, por el exgobernador de triste memoria, se antoja contundente e inevitable.
Ahora la prensa mercantilista y los nostálgicos de aquellas subvenciones de complicidad, se desgarran las vestiduras para defender a los delincuentes del pasado de que tanto se beneficiaron y atacar el proceso sanitizador del ejercicio público y la justicia.
En sus afirmaciones, reñidas con la verdad y la decencia, llevan las consecuencias del descrédito y la condena, hasta el punto que ninguna mella hacen en la opinión pública, consciente y politizada.
Mientras aquellos prosiguen vociferando estruendosos, en el desierto, por las autoridades actuantes siguen hablando Los Hechos.
El gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA se reunió ayer con empresarios de alto calado y funcionarios de los tres órdenes en El Mante, para explorar nichos de inversión que potencien la producción, la economía, las oportunidades de empleo y de negocio en la llamada región temporalera.
¿Que hicieron los caciques pueblerinos del pasado sexenio?
Echaron en corrida, con agresiones físicas e insultos, a los representantes de esos capitales que dieron vida por muchos años a la economía del vecino Xicoténcatl y sus alrededores.
¿Qué hace AMÉRICO y su equipo ahora por esos rumbos además de reanimar la inversión privada?
Suman cientos, miles de millones de pesos los que se invierten en la supercarretera Ocampo-Tula y su interconexión por El Limón y el mismo Xico, a las modernas vías de comunicación que conectan con los puertos del sur tamaulipeco.
La obra en la construcción, de suyo, ya es una inyección económica sin precedentes en la región; cuando empiece a operar y será este mismo año, el abanico de posibilidades se vuelve interminable.
Esas son las grandes diferencias que ninguna nota falsa, insulto, denostación, amago, intento de persecución va a detener, o cambiar la percepción del pueblo respecto del antes y el ahora.
Así como durante el “cabezato” permeó entre toda la sociedad tamaulipeca el “mal humor social”, con VILLARREAL ANAYA hoy campea la confianza, la esperanza, el aprecio, es decir, el buen humor social que nos hizo tanta falta en esa página negra acentuada durante el pasado sexenio.
Es una historia en construcción sobre las ruinas del pasado.