José Inés Figueroa Vitela
A un costo multimillonario, que los participantes deberán explicar aparte a la autoridad, el exgobernador de triste memoria sigue tratando de evadirse de la justicia, cometiendo más delitos.
Recién fue un periodista nacional, quien hilvanó los hilos de cómo FRANCISCO JAVIER “N”, ha estado detrás de las denostaciones en contra del expresidente AMLO y su familia, de Morena y sus cuadros distinguidos, así como de los gobernadores de Sinaloa y Tamaulipas.
Con el mismo modus operandi, CABEZA DE VACA a través de empresas fachada, ha pretendido poner en boca de terceras personas, falsos testimonios para endosar el tipo de delitos por él cometidos, a terceras personas.
Siempre, buscando desviar la atención, presionar y desprestigiar a sus persecutores, para evitar pagar por sus culpas, así como ganar otros réditos.
Los investigadores privados apócrifos, se han hecho pasar por empresarios, otorgando viajes lujosos, con caros vuelos de primera clase, hospedajes en hoteles de alta factura y restaurantes de postín en el extranjero.
Es esos escenarios montados, se han dedicado a ofrecer jugosos contratos, adular e intentar poner en boca de sus estimuladas víctimas, graves acusaciones contra la gente en el poder.
“Tú eres muy poderoso; te necesitamos para que nos representes en México y Latinoamérica”, le dijeron a RICARDO GAMUNDI en Houston, haciéndose pasar por los reyes del marketing internacional.
Entre finas viandas y caros vinos, estuvieron queriendo sonsacarle para que dijera que Morena compraba a los diputados de oposición para atacar a sus líderes y torcer la ley en su beneficio.
A JUAN MONROY, exfuncionario menor de la Unidad de Inteligencia Financiera, lo llevaron hasta Nueva York, también ofreciéndole empleos maravillosos, con la intención de que dijera, en la etílica entrevista de trabajo, que le habían inventado el expediente al exgobernador de Tamaulipas.
En una falsa entrevista de trabajo abundaron los mariscos y bebidas caras, ofreciéndole el itacate para que se lo llevara a su casa, en un reflejo más de la estrechez moral e intelectual de los participantes.
De la misma forma lo hicieron con el exsubsecretario de salud de Tamaulipas HORACIO GARCÍA ROJAS y la exfuncionaria de Bienestar en Sinaloa JOSELYN HERNÁNDEZ JIMÉNEZ.
Incluso, con SERGIO EDUARDO HUMPHREY JORDAN, cuñado del extitular de la UIF a quien fueron a “entrevistar” hasta Londres, para endilgarle expresiones contra la familia del expresidente y su pariente político.
En ningún caso les ha funcionado y han tenido que pagar a medios y periodistas, para que den por ciertas, acusaciones carentes de sustento; los medios serios e independientes nunca les han dado cabida.
En el caso de JOSELYN HERNÁNDEZ, con el que se inicia la publicación de ayer y del que antes en este mismo espacio le compartimos las añejas erratas impublicadas, la han “sembrado” en medios como testigo de financiamientos ilegales a las campañas de Morena en Sinaloa y Tamaulipas, por el hecho de que estuvo como funcionaria de la Secretaría de Bienestar en el primer estado.
La cuestión es que su paso por esa entidad y dependencia se dio, varios años antes de que se celebraran los procesos electorales, de los que resultaron electos aquellos, así que sus desmentidos han resultado contundentes.
No obstante, los audios manipulados y obtenidos subrepticiamente, siguen siendo usados en las anticampañas del cabecismo hasta nuestros días.
Las grabaciones que hicieron sin el consentimiento de ella y los demás aludidos, de lo que dejan constancia, es de la insistencia de los “investigadores” por ponerles palabras en su boca, sin que haya la “confesión” que luego aseguraron existió, con todo y el alcohol, adulaciones y promesas de estímulos tratando de influir.
La mayoría de ellos han hecho los desmentidos en tiempo y forma, sin que hayan trascendido, la más de las veces, con el mismo ímpetu, porque no se han cruzado los pagos que existieron para propalar los infundios.
La perversidad del exgobernador de triste memoria, solo se equipara con el de su cuerpo de asesores legales encabezados por el tristemente célebre JAVIER COELLO TREJO -cuyas factura se tasan en decenas de millones de pesos-, los mentados “investigadores privados” dedicados a tender trampas para sonsacar declaraciones falsas y los jueces que han ido postergando el ejercicio de la justicia.
Dios los hace… ellos se juntan.
