mayo 8, 2024
Publicidad
Ana Medina

La Niña y la Mujer en la Ciencia

febrero 9, 2024 | 177 vistas

El año pasado me tocó un evento en el Tamux para celebrar a “la niña y la mujer en la ciencia” y es que con pena tengo que confesar que no conocía esa celebración. Pero a lo largo de este año he podido confirmar que aunque el 80 por ciento del magisterio está conformado por mujeres, la verdad es que también está centrado en una cultura machista… y en el patriarcado opresor.

Como docente siempre he apoyado la idea de que mis alumnos pueden hacer lo que quieran hacer, mientras no se dañen a ellos mismos o a los demás, mientras aprendan pueden intentarlo todo por lo menos una sola vez en la vida sin importar si es niño o niña.

JOVEN O SEÑORITA…

Esta diferencia tan marcada que empieza en la secundaria continúa hasta el postrado. Aún en el 2024 es posible ver que hay carreras que están diseñadas para mujeres; como la Normal de Educadoras y eso que conozco varios “educadores de preescolar”, pero la nomenclatura de la institución no deja lugar a dudas, ninguno de ellos ha egresado de esa escuela.

Si nos vamos a la autoridad educativa, tenemos a la segunda autoridad estatal en la historia del sexo femenino; la mayoría de sus colaboradores son mujeres y, aunque aún es pronto para hacer una crítica a su trabajo, puedo asegurar sin lugar a duda y con sororidad que no podría criticar su desempeño ni brindar mi apoyo ciego al simple hecho de “girl power”, sino lo que realmente se vea.

Como docentes nos toca enseñar a nuestras alumnas a desarrollar un pensamiento crítico; dentro y fuera de la escuela. He conocido grandes maestras ejemplos a seguir y sé que hay mujeres exitosas en todas las ramas del conocimiento.

Tal vez en educación no sea necesario, pero en muchas áreas las mujeres necesitamos más presencia para reducir lo que se denomina “brecha y sesgo de género” y es que esto no es una creencia nueva; mi generación no es tan nueva y tengo compañeros de varias generaciones para quienes nuestra crianza fue distinta y porque crecimos en diferentes épocas.

Es muy divertido hablar con nuestros alumnos sobre cosas como los casetes de música o la telefonía alámbrica, y qué decir de los mensajes de texto, en una clase se me ocurrió decir que cuando era joven no existían y las carcajadas no faltaron (que porque me veo joven), pero la verdad es que cuando era niña NO EXISTÍAN.

La mayoría de nuestros alumnos tienen hoy acceso a libros digitales y las notas ya no tienen que ser a mano (aunque para la motricidad fina sigue siendo crucial este aprendizaje) los impresos en algunos contextos muy favorecidos ya no son prioridad.

Hoy los cuadernos y libros digitales no son parte de una película de ciencia ficción… es la ciencia que está en movimiento y como ello hay muchos inventos o innovaciones que como docentes nos toca presentarles a nuestras alumnas para que comprendan que los sueños se hacen realidad y la ciencia es importante, porque lo demuestra.

Resaltar la participación de la niña y la mujer en la ciencia, y que esta fecha (11 de febrero) esté en el calendario como parte de las actividades del año escolar toma auge en el trayecto que nuestra sociedad vive y que la participación de las mujeres va en aumento.

La ciencia debe ser accesible para todos.

Hace un año no entendía bien lo que la Metodología STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas por sus siglas en inglés) podría hacer en el trabajo con mis alumnos, más allá de enseñar a leer y escribir, estimular la creatividad, las ciencias, las artes, y el uso de las tecnologías; este tipo de trabajo en el aula permite una aproximación al proceso enseñanza aprendizaje desde un proceso activo, impulsado por el juego y la experimentación y si bien está enfocado en la resolución de problemas mediante preguntas e indagaciones no es algo ajeno al desarrollo integral regular de nuestros alumnos en cualquier nivel educativo.

Esta celebración del día de la niña y la mujer en la ciencia debería servirnos a los docentes para replantear el contexto en el que se desenvuelven nuestras alumnas, si bien no es algo que podamos cambiar, siempre será posible influir en ellas (y ellos) para que logren una pequeña diferencia. La resiliencia que tanto necesitamos algunos sale de ahí.

A pesar de todos los avances, todavía son numerosos los desafíos y brechas existentes desde la educación básica hasta los más altos cargos en el ámbito de la investigación en STEAM, y como en otras áreas hay diferentes factores involucrados, desde los sociales, culturales, financieros, entre otros.

Un punto importante para mis alumnas en ocasiones es la falta de representación femenina en las posiciones de liderazgo lo que contribuye a que las niñas y jóvenes tengan poca exposición a líderes femeninas (ojo que no dije feministas), pero su modelo a seguir es y siempre será un docente.

Y sí… todo comienza con una maestra. Siéntanse orgullosas.

Comentarios