Queridos amigos, hoy les hablaré desde mi experiencia en los medios de comunicación tengo amigos y amigas de todos los partidos, de todos los movimientos, de todos los colores, gente buena y trabajadora, pero en ocasiones algunos se apasionan de más en el tema político, los representantes de dichos partidos hoy están en uno y mañana en otro, forman acuerdos, alianzas, cambian de partidos, se une a otros, cambian de colores, conforme sea más conveniente a su vida personal, esto no es ningún secreto, todo lo sabemos, desde este punto invito a la reflexión, la política es el arte de hacer alianzas y hoy puedes estar hablando horrores y maldiciendo a alguien que en unos meses tendrás puesta su foto y su color en tu perfil, lo he visto durante mucho tiempo suceder.
Te tocará aplaudir a quien despreciabas si tu partido así lo considera adecuado.
Otros más van de color en color y en ese proceso van enemistándose con la gente que los rodea.
Los políticos de carrera lo saben y son plurales y siempre diplomáticos en su trato con todos, es parte del arte de ser político.
¡Por qué hoy están aquí y mañana pueden estar allá!
Pero los ciudadanos, (no todos) no termina esto de quedarles claro, y se encaminan a una defensa a muerte de sus dirigentes partidistas, candidatos o colores, tengamos la autonomía de elegir libremente lo que nos parezca lo mejor de forma individual sin tener que odiar al prójimo si opta por lo contrario, seamos tolerantes a las preferencias ajenas, no genere violencia porque su amigo, vecino o compañero de trabajo anda agitando su banderita por otro color opuesto al suyo, defienda con argumentos su postura si alguien desea saberla, si nadie le pregunta no vaya queriendo someter voluntades ajenas, al final de cuentas ya no queremos más violencia en nuestro país y más guerras por mínimas que estas le parezcan, más divisiones innecesarias, defienda su postura y preferencia electoral en la urna con su voto, y sea tolerante y pacífico en el proceso, muestre ser un ciudadano de altura, con capacidad de diálogo y debate, pero no vaya por allí matando cristianos con su lengua y escritura en el proceso.
La polarización ha alcanzado grados importantes que llevan a los más crueles escenarios, incluso a pérdidas humanas, la violencia no debe ser el factor que prevalezca en una contienda electoral.
¡Vivamos una democracia genuina!
¡Por el bien de todos!