Melitón Guevara Castillo.-
La política, sus decisiones y sus acciones, se ven a partir del comportamiento de los actores o protagonistas. En este caso, es preciso recuperar la expresión que utiliza Ricardo Monreal en Tamaulipas al referirse al actual proceso de selección interna en Morena para elegir a su candidato presidencial. El tapado sigue vigente, solo que ahora son corcholatas, entre las que tardíamente fue incluido el senador zacatecano.
Priva la ley de la selva: la ventaja, el puntero, siempre es el más fuerte. Y en este caso, creo que nadie lo desconoce, hay dados cargados, amén de una manipulación puntual de las condiciones y los recursos económicos y políticos. Para nadie es un secreto que el Presidente tiene en la Jefa de Gobierno a su alfil, como bien dice, para que haya un cambio generacional.
LA VENTAJA
En toda competencia el factor crucial son los recursos. Por eso, en su momento, oportunidad, Marcelo Ebrard llegó a proponer que todos renuncien y que, de esa manera, cada una de las corcholatas juegue con sus propios recursos. Claudia Sheinbaum Pardo explicó que ella tenía una encomienda popular y tenía que cumplirla. El hecho real es que su ventaja proviene de las actitudes del Presidente AMLO, que la apapacha, la presume, la placea.
Lo único que puede cambiar la percepción actual es que Claudia sea una pantalla, una propuesta espejo, para cubrir al verdadero alfil presidencial. Sin embargo, son tantos y tantos los hechos, que difícilmente se puede pensar en otra opción… menos luego de que el mismo Presidente puntualiza que no será como Lázaro Cárdenas, que no va a zigzaguear. Y es que Claudia es la personera de los radicales dentro del gabinete presidencial… Por eso, hay quien ya advirtió que Claudia será peor que AMLO.
LA AVANZADA TAMAULIPECA
Si pensamos en la elección presidencial del 2024, también debemos de pensar en el resto de lo que se juega, en este caso, las senadurías y las diputaciones federales, así como las presidencias municipales. En este sentido, vale anotar que Américo Villarreal Santiago lleva buena ventaja rumbo a la senaduría… claro, él dice que no la busca, pero no es el momento para evidenciar y hacer públicos los proyectos políticos.
Américo Jr es un ciudadano con sus derechos vigentes, en tal circunstancia nada impide que pueda ser candidato. Los ejemplos son variados, basta recordar como los Moreira se heredaron el poder; como Francisco Javier García Cabeza de Vaca hizo a su hermano senador. Lo único que puede impedir que Américo Jr. sea candidato es la ética o moral de su padre. Pero, por lo que se ve, no lo detendrá, puesto que en este momento le concede todas las ventajas del poder para placease, hacer proselitismo, posesionarse en el ánimo de la gente.
ARMAS PROPIAS
La ley de la selva tiene sus asegunes dependiendo de la cancha donde se juegue. El caso de Ricardo Monreal, por decir, pelea con sus propias armas: su experiencia como político, que ganó la gubernatura de Zacatecas dejando al PRI, que ha sobrevivido a lo largo de más de 20 años junto a AMLO, pero sobre todo que ahora como senador se ha mostrado como un verdadero operador político; que ha resistido embates, que ha logrado armonizar intereses y negociar una agenda legislativa, que le ha dado las contras al Presidente AMLO, a Morena, y que aún sobrevive.
Muy distinto caso de Américo Villarreal Santiago: no tiene experiencia política, ni como servidor público, si como junior, y está en la selva política jugando con una fuerte coraza, que son las armas de su padre, el Gobernador. Va por todo el estado repartiendo despensas, participa en cabalgatas, aparece en eventos públicos estatales… es el representante del Gobernador, justificó Verónica Aguirre, de la Secretaría de Bienestar Social, cuando le cuestionaron que el Jr. inaugura eventos públicos de la dependencia.
LA SUERTE
En resumen, observamos que Ricardo Monreal construye, desarrolla, una lucha política a partir de sus propias armas; son las que le han permitido forjar una larga carrera, con tremenda experiencia en el arte de negociar. Con todo y esto, es difícil, muy difícil, que logre su propósito de ser candidato presidencial por Morena. Y si está en la boleta con otra marca, difícilmente logrará su propósito de gobernar a México.
En cambio, Américo Villarreal Santiago, dadas las condiciones dentro y fuera de Morena, sí puede convertirse en el próximo senador tamaulipeco. Lo hará, lo será, por las armas de su padre, el Gobernador, y quizá por azares de la fortuna. Morena en la entidad no tiene, ni tendrá oposición, va a ganar con cualquier candidato y sin pudor puede ser el junior gubernamental… a menos que se impongan intereses supraestatales.
