Oscar Pineda.-
La discusión sobre retirar los escoltas a los exgobernadores, ex procuradores y exsecretarios generales, indiscutiblemente subirá de tono en el Congreso local en la próxima sesión ordinaria.
El tema es tan polémico que ni siquiera es la primera ocasión que se pone sobre la mesa, de hecho, en los tiempos del propio Cabeza de Vaca los diputados del PAN de ese entonces aprobaron una reforma para quitarle la seguridad al ex gobernador Egidio Torre Cantú, así como al exsecretario de Gobierno y al ex fiscal.
Luego, al final del sexenio cabecista era inminente, los panistas en el Congreso decidieron echar abajo su propia reforma y regresarle la protección al ex gobernador y al exsecretario César “Truco” Verástegui.
La realidad es que por la naturaleza del cargo tanto del gobernador, como del Secretario General y del Fiscal, se podría justificar que tuvieran cierta protección durante un tiempo prudente. Quizá el planteamiento debería ser ¿cuántos elementos como máximo?
El ejercicio del poder siempre genera enemistades y enconos que pueden representar un riesgo para quienes dejan de ejercer un cargo.
Ahora bien, si le preguntamos a la gente de a pie como usted y como yo, muy probablemente nos dirían que no están de acuerdo en que los ex tengan servicio de seguridad con cargo al erario -Al fin robaron un chingo- ya parece que escucho a don Cele, el carnicero del mercado.
Visto desde esa perspectiva hasta se podría pensar que tanto los exgobernadores, como los exfuncionarios de primer nivel salen con suficiente dinero como para pagar ellos mismos su seguridad personal.
El tema es tan polémico como la asignación de vehículos de gama alta y blindados a funcionarios que no tienen tareas de seguridad, mientras los policías andan en cafeteras rodantes exponiendo la vida todos los días.
En fin, el tironeo va a ser interesante, pues el grupo de Morena que comanda la tampiqueña Úrsula Salazar Mojica, necesitará 24 votos para poder echar abajo el blindaje del ex gobernador, los exsecretarios y el fiscal.
EL PERSONAJE
El presidente Andrés Manuel López Obrador visitará la frontera de Tamaulipas el fin de semana.
AMLO estará en Matamoros y Reynosa, dos de los municipios que en los últimos días han sido más afectados por los enfrentamientos entre grupos del crimen organizado y autoridades de seguridad.
Sobra decir que el fin de semana la frontera estará más que blindada para la visita del mandatario nacional, quien seguramente después dará sus impresiones sobre el tema de seguridad en la frontera tamaulipeca.
POSDATA
No sé dónde leí esto, pero me parece que tiene sentido: “las reses de hoy serán los carniceros de mañana”, o algo así, la idea es esa…
