Rogelio Rodríguez Mendoza
CUATRO AÑOS ESCONDIDOS.- La pandemia del Covid-19 inició en marzo del 2020 y la Organización Mundial de la Salud, (OMS), la declaró superada en mayo del 2023.
Sin embargo, a ocho meses de que los gobiernos levantaron la emergencia en general, los magistrados del Tribunal Electoral de Tamaulipas siguen “amachados” en sesionar en privado.
Es decir, en marzo del presente año van a cumplir ¡cuatro años sesionando en lo oscurito!
Hasta mayo pasado había justificación para trabajar alejados del escrutinio público, pero de ahí hacia acá ha sido solo chiflazon, (o como usted le quiera llamar) la de sesionar de forma privada.
¿Qué esconden los magistrados electorales, y en particular su presidente, Edgar Danés?
Lo más raro de todo es que las voces legitimadas para llamarlos al orden están calladas. Caso específico la del Senado de la República.
¿Dónde están los partidos políticos y las organizaciones ciudadanas que nada dicen y nada hacen al respecto?
Dicen que, lo que no descubre el agua lo descubre el tiempo, y eso seguramente sucederá con los jueces electorales tamaulipecos: el tiempo evidenciará su secreto.
¿CÓMO LE HACE?.- A propósito de magistrados, en la página de internet del Poder Judicial del Estado sigue apareciendo como titular de la Sala Regional, con sede en Altamira, Andrés González Galván.
El hecho merece mencionarse porque se registró como precandidato del PAN a la alcaldía de Madero, el municipio que lo vio nacer.
La pregunta es: ¿Cómo le hace para andar inmerso en la grilla sin descuidar a los justiciables que acuden ante su Sala? Interesante saberlo.
Por lo demás, es válida la aspiración de Don Andrés, aunque se ve complicado que pueda lograr la candidatura porque hay aspirantes mucho más cercanos al exgobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, quien será el dedo ungidor de quienes aparecerán en la boleta electoral.
Sin embargo, el hombre le hace la luchita, tal vez aplicando aquella estrategia de tirar arriba para pegar abajo.
A favor del magistrado hay que destacar que, como jurista tiene credenciales envidiables. Cuenta con una maestría, un doctorado y una docena de diplomados en diversas materias.
Seguramente sería un excelente alcalde, porque además de experto en Derecho conoce muy bien la problemática que aqueja a Madero
Con el añadido de que su padre, Guadalupe González Galván, ya fue alcalde de ese mismo municipio.
“LLUVIA DE AMPAROS”.- Decíamos recientemente aquí, que la decisión del gobierno del estado de privatizar la carretera Rumbo Nuevo, para garantizar su rehabilitación, es buena, porque permite que los recursos públicos que se tendrían que invertir sean destinados para cubrir otras prioridades sociales.
Sin embargo, el que sea una buena obra no significa que sea legal. Le garantizo que, muy pronto comenzará a darse una “lluvia” de amparos en contra del cobro que comenzará a aplicarse a los usuarios.
Peor aún: las apuestas van de 10 a uno a que los tribunales jurisdiccionales terminarán dándole la razón a los quejosos, lo que en palabras llanas significa que los jueces de amparo invalidarán la privatización de esa vía.
¿A razón de qué una carretera que se construyó con recursos públicos ahora es entregada a la iniciativa privada? Ese es uno de los principales conceptos de violación que seguramente querrán hacer aquellos que acudirán ante la justicia federal.
ASI ANDAN LAS COSAS.
