Rogelio Rodríguez Mendoza
MÁS MIEDO.- El asesinato del alcalde con licencia de Mante y candidato a la reelección, Noé Ramos Ferretiz, vino a enturbiar y a generarle más inseguridad al proceso electoral en curso.
Será inevitable que, de aquí y hasta el dos de junio, habrá más temor entre quienes buscan un cargo de elección popular, pero también entre el electorado. Prueba de ello es que, a las pocas horas del homicidio del abanderado del PAN, PRI y PRD, otros contendientes se acercaron al Ietam para pedir protección policial.
Sin embargo, está claro que no hay manera de que las autoridades garanticen protección a los candidatos. Por más escoltas que los protejan, son vulnerables, sí o sí.
Ahora que, más allá del resultado que arroje la investigación del crimen, habría que preguntarnos: ¿A quién beneficia el asesinato del alcalde con licencia de Mante? ¿A cuál de los partidos políticos en competencia le favorece un escenario de miedo?
Que cada quien saque sus conclusiones.
¿EL FIN DEL CABECISMO?.- A propósito del PAN, el revés que asestó el Tribunal Electoral federal al exgobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, al anularle la candidatura a diputado federal, vino a acelerar el debilitamiento del cabecismo y a envalentonar a sus opositores.
Seguramente en los días por venir habrá más panistas que se sumarán a personajes como Arturo Soto Alemán, Jesús, “Chucho”, Nader, Francisco Garza de Coss y la diputada Nora Gómez, entre otros, que abiertamente se han mostrado contrarios al grupo que encabeza el exmandatario y su hermano Ismael.
Más aún cuando pareciera que, desde el Comité Ejecutivo Nacional del PAN, y desde el equipo de la candidata presidencial, Xóchitl Gálvez, ya se convencieron de que Cabeza de Vaca resta mucho más de lo que suma.
Y es que, si el PAN quiere recuperar lo perdido en las últimas elecciones tendrá que deshacerse por completo de los Cabeza de Vaca y comenzar a construir nuevos liderazgos, de entre los cuales salga uno que tenga los alcances necesarios para pelear la gubernatura en el 2028.
Veremos.
“GEÑO”, EL TERCERO.- Otro exgobernador que debe andar preocupado es, Eugenio Hernández Flores, el mismo que quiere ser Senador bajo el cobijo del Partido Verde Ecologista de México.
No es para menos luego de que algunas encuestas lo ubican en un lejano tercer lugar de las preferencias, por debajo de la panista, Imelda Sanmiguel Sánchez, quien por el contrario cada día suma más simpatizantes.
“Geño”, ya debió de darse cuenta de que el escenario político de hoy es muy distinto al que prevalecía cuando dejó la gubernatura, y que aun y cuando fue un buen mandatario, las simpatías que le siguen profesando muchos tamaulipecos no le garantizan un triunfo en las urnas.
El voto duro del geñismo está focalizado en los municipios de la zona centro del estado, y un poco hacia el sur, pero hacia el resto del estado tiene muy poco o casi nada.
En esas condiciones, algo tendrán que hacer el candidato y su equipo porque la curul en el Senado se le escurre de las manos y con ello el buscado fuero constitucional con el que se libraría del riesgo de la extradición a Estados Unidos.
El problema es más grande para el expriista, porque su compañera de fórmula, Maki Esther Ortiz Domínguez, no ayuda mucho en la suma de votos. Y menos ahora en que anda conflictuada con el morenismo, donde no la ven con muy buenos ojos, sobre todo cuando cada día es más obvio su proyecto de convertirse en candidata a la gubernatura en el 2028.
ASI ANDAN LAS COSAS.
