El acoso es un fenómeno que se registra principalmente en el área escolar y que se encuentra presente en varios niveles de educación en México, representa un problema latente que altera la convivencia y las relaciones interpersonales de niños, niñas y adolescentes.
El acoso escolar y bullying son considerados graves problemas de salud física y mental pública para niños, niñas y adolescentes, afecta a las víctimas y no considera estrato social, edad, raza, género o religión. El bullying es la acción que puede involucrar violencia verbal, física, psicológica o todas.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) considera en sus datos estadísticos que más de 280 millones de niños, niñas y jóvenes del planeta han vivido y sido víctimas de algún tipo de acoso, violencia y hostigamiento escolar.
Asimismo, la Unesco destaca que cada mes, uno de cada tres educandos sufre acoso escolar en todo el mundo y más del 36 por ciento de ellos, se ven afectados por una riña física con algún compañero y casi uno de cada tres ha sido agredido físicamente al menos una vez al año.
El cyberacoso es un problema creciente que afecta a uno de cada diez niños. El 67 por ciento de los usuarios de Internet consideran que han encontrado algún tipo de discurso de odio en línea y el 85 por ciento señaló su preocupación por el impacto de la desinformación, lo que pudiera generar desestabilidad.
El bullying físico es el tipo más frecuente en todas las regiones, excepto Europa y América del Norte. A nivel mundial, el 16.1 por ciento de los niños que han sido acosados afirman haber sido golpeados, pateados, empujados o encerrados en algún lugar. Así también más del 30 por ciento de los alumnos en el mundo han sido víctimas de acoso, lo cual provoca consecuencias en su rendimiento escolar, salud física y mental.
En América Latina es muy marcado este tipo de acoso y violencia entre los educandos, el ciberbullying es otro tipo de hostigamiento y va en aumento.
El comportamiento de los niños y adolescentes que lo viven sufren daños emocionales y físicos que los altera y afecta psicológicamente, mientras el que lo practica y lo promueve se conduce mediante una actitud de tipo perversa y ejerce una situación de abuso de poder, se conduce a través de la agresión verbal y en ocasiones con el uso de la fuerza y de manera física con la intención en muchos de los casos de hacer daño, creando una situación de intimidación y miedo, lo que provoca vulnerabilidad e indefensa de la víctima.
Este tipo de violencia es importante identificarla, ¿cómo surge? y qué se puede hacer para evitarla, además de crear conciencia sobre las consecuencias que puede tener en la vida de las niñas, niños y adolescentes que lo padecen.
Los actos de violencia pueden variar, algunos pueden presentarse mediante la burla o cuando se ponen apodos y ofenden a las víctimas; otra forma es la agresión física (pegando, empujando o amenazando), mientras el rechazo sería otra de las formas. Así también se encuentran las burlas entre los menores por no tener celular o tablet.
Se debe de considerar las características distintivas del bullying, el tipo, grado, intensión del daño, la frecuencia de la ocurrencia y el tipo de intimidación.
Ello integra el maltrato físico y psicológico, el tipo de agresión, el maltrato verbal, el acoso directo o indirecto, la exclusión social, el desprecio. El ciberbullying está relacionado con las agresiones en redes sociales, correo electrónico o mensajes de texto.
Cabe destacar, que estas malas prácticas se registran en una situación de relación interpersonal y grupal, lo que en ocasiones es desapercibido y sin la importancia debida de las autoridades escolares.
La ONG Bullying Sin Fronteras señaló que en 2023 se registraron 270 mil casos de bullying en el país, ubicando a México en el primer lugar mundial. Lo que representa una gran preocupación para la sociedad tan compleja que integra el país, activa las alarmas de atención hacia las autoridades educativas y las familias para que actúen inmediatamente en trabajar de manera conjunta para erradicar estas irregulares prácticas de acosos, daño psicológico o físico y prevenirlo.
De acuerdo a un estudio de enero de 2022 a abril de 2023, la Organización Internacional Bullying “Sin fronteras” señaló que los casos de bullying en todo el planeta continúan en aumento, seis de cada diez niños sufren todos los días algún de tipo de acoso y cyber-acoso. Al 2023 el reporte indica que siete de cada diez niños, niñas y adolescentes en México sufren algún tipo de acoso o daño. En el reporte de los años 2020 a 2022 se emitió un registro de 180 mil casos en el país.
El bullying o acoso escolar y el ciberbullying son causantes directos de más lesiones y muertes, ya sea por homicidio o por inducción al suicidio.
Recientemente en el municipio de Nuevo Laredo, en el estado de Tamaulipas un adolescente de nivel secundario trató de atentar contra su vida al ser víctima de bullying por parte de sus compañeros.
El menor que cursa el primer grado de secundaria estuvo internado en el Hospital General de Zona Número 11 del Instituto Mexicano del Seguro Social, donde se le atendió de las lesiones que sufrió al arrojarse de la segunda planta del patio de la escuela.
Algunos compañeros del menor señalaron por medio de redes sociales que el alumno era “bulleado” por otros estudiantes. Se sabe, que supuestamente el adolescente era agredido verbalmente por otros alumnos mayores que él.
El crecimiento del bullying es crítico, solamente en el 2023 en México se registró una mayor cantidad de casos en el mundo, mientras que Estados Unidos se colocó en segundo sitio con 250 mil y España en tercer lugar con 69 mil, 554 casos.
Se estima que esta práctica registra más de 160 mil muertes al año en todo el mundo, debido a algún tipo de agresión que resulta en la muerte o genera suicidios de personas que son víctimas de acoso, ello se presenta especialmente en entornos donde los adultos no están presentes.
La Encuesta Nacional sobre Discriminación (Enadis) del Inegi del 2022 señaló que 11.7 millones de personas de 12 a 17 años que asistían a la escuela en México, el 28 por ciento comunicaron haber sido víctimas de acoso escolar en los últimos 12 meses, elevando a 3.3 millones de estudiantes adolescentes la cantidad de víctimas de esta forma de violencia. El 2.9 millones de personas de entre 12 y 17 años experimentaron alguna situación de ciberacoso, lo que correspondió al 22.6 por ciento de usuarios de Internet de ese rango de edad a nivel nacional.
Así las cosas…
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Nos vemos a la próxima.