“Entre Alitos (AMLITO) y aves blancas voladoras te veas”, es lo que me dijeron la última vez que pasé por las oficinas del PRI en Tamaulipas, pero también vale para la casona vetusta del CEN del PRI de Insurgentes Norte.
No es agresividad ocurrente y menos recurrente, aunque se los merezcan, pero es evidente que el Partido Revolucionario Institucional se ha convertido, en la opinión pública, en un satélite de la Cuarta Transformación de la mano de su dirigente nacional Alejandro Moreno, a quien cuando conviene, el Gobierno federal pone de rodillas.
Rey de la palabra, en los hechos, ahí está el deterioro de espacios que antes fueron de control de PRI, y que fueron entregados muchos de ellos a Morena por gobernadores a los que poco les importó traicionar sus bases y afluente de riqueza.
Todos en pro de una impunidad que les puso a salvo de actos exponenciales de presunta corrupción y riqueza personal, que los pudo llevar a la cárcel y que ahora, sus pecados fueron olvidados, transformados en hielo.
Por lo mismo, hablar de “mezquino tricolor viejo, no acepta maroma nueva”, es hacer una puntual crítica a un partido o grupo que sigue aferrado a sus viejas formas de hacer las cosas y no se adapta a las nuevas realidades o estrategias, aunque ya no sean efectivas.
En Partido Revolucionario Institucional sus vicios y prácticas antiguas, no consideran modernizarse o cambiar genuinamente para responder a los nuevos tiempos.
¿Maroma nueva? ¿Con Paloma, con los chiquitos de Edgar, con Sergio o Carlos? Imposible, porque además el PRI de hoy es el reflejo de quien aprendió de sus errores. Si no que, menos le interesa adaptarse a las exigencias actuales.
Y en la evidencia ahora se presenta como aliado de la “Cuarta Transformación”, sigue siendo una versión de sí mismo con prácticas viejas, sin realmente renovarse o mejorar.
Y aunque juegan a la democracia, en el caso por ejemplo de Tamaulipas, bien que sabemos que los antes mencionados llegaron por dedazo, incluso Guajardo con el respaldo “democrático” del exgobernador Francisco García Cabeza de Vaca.
Por lo mismo, más allá de los méritos que cada quien tenga, entre Luis Enrique Arreola, Ramiro Ramos, Pedro Luis Coronado o Arturo Muñiz, muchos en el PRI están conscientes de que el CEN de Alito va a salir con un aliado que le lustre los pensamientos.
A esta hora se realizaba el análisis del procedimiento, se espera que sea por Consejo Político, lo que se resume a que habrá línea, y en este sentido, por supuesto que los seguidores de Luis Enrique Arreola alzan la voz, en el sentido de que, él es quien tiene más merecimientos.
Pero vamos a leer la convocatoria, cuando resulte, porque otro asunto será ver, quiénes son parte del Consejo Político Estatal, donde creo, muchos ya están en Morena o bien jugando doble.
Y si, a la pregunta de quiénes son satélites, como en los viejos tiempos del PARM o PPS con el PRI, ahora en torno a Morena están el mismo tricolor, el PVEM, el PT.
Manuel, Eugenio, lo que se ve no se juzga. Solo se disfruta… Y que viva Sullivan.
Del cuarto piso.- Al inaugurar el Rector de la UAT el Primer Taller de Liderazgo Juvenil “Rompiendo Barreras: Humanismo Transformador”, ante cientos de estudiantes en el Centro Universitario de Victoria, Dámaso Anaya sostuvo que la idea es convertirlos en agentes de cambio en la sociedad y que asuman el compromiso de ser líderes con un profundo sentido humanista, capaces de transformar su vida y el entorno.
En este sentido, “la Universidad se enorgullece de ofrecer estos espacios para su formación integral, porque no solo se busca preparar profesionistas de alta calidad académica, sino también ciudadanos comprometidos con el bienestar social”.
Nostra política.- “La primera máxima de todo ciudadano ha de ser la de obedecer las leyes y costumbres de su país, y en todas las demás cosas gobernarse según las opiniones más moderadas y más alejadas del exceso”: Descartes.
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