José Inés Figueroa Vitela.-
Algunos funcionarios que vienen del sexenio pasado y otros actores políticos, entre los que se contarán diputados del PAN, no alcanzan a comprender por qué debe combatirse la corrupción hasta sus últimas consecuencias y transparentar el oficio público.
Todo ello se resume en la frustrada comparecencia del secretario de Finanzas de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, FRANKLIN HUERTA CASTRO, ante las Comisiones unidas de Vigilancia de la Auditoría Superior y de Anticorrupción y Participación Ciudadana, del Congreso Local.
Desde el Rector GUILLERMO MENDOZA CAVAZOS, hasta los presuntos implicados en la ilegal venta de -al menos- una flamante camioneta de lujo, por el Tesorero, al Tesorero -de la UAT a la esposa de FRANKLIN-, con algún intermediario cómplice, parecen querer normalizar el delito.
Cosa que fue lugar común durante el pasado sexenio, en alardes de impunidad que les llevaron a ni siquiera guardar las formas, cada que cometieron un despojo en contra del patrimonio público, de los tamaulipecos todos.
No costó eso; se vendió en más; no hubo daño al patrimonio institucional, proclamó el responsable del Alma Mater, sin caer en la cuenta, o dejando de lado el hecho de que, fue el responsable de cuidar el tesoro universitario, quien trianguló hechos para hacerse de un vehículo público.
Lo hizo -la explicación-, dos semanas después de que la diputada MAGALY DEÁNDAR RÓBINSON presentó la denuncia en el Congreso, dos meses después de que también una particular lo hizo en el órgano de control interno, y tres meses después de que se pidió y escamoteó la información al respecto, a través de la Plataforma Nacional de Transparencia.
Para ellos eso puede parecer normal, pero no es para la ley y menos para la justicia, como no lo es para el pueblo agraviado, que ha sido testigo de los excesos de malos servidores públicos, cuyos privilegios han ido en detrimento de las condiciones de vida de todos.
La Cherokee 2021 de lujo, que se vendió el Tesorero de la UAT, comprándole un seguro de la más alta cobertura para el siguiente año, antes de adjudicársela, con el presupuesto que le confiaron, es solo uno de los siete vehículos que este año se desincorporaron del patrimonio público en la más completa opacidad.
De las 67 unidades motrices, más viejas, más gastadas y de menor costo, que hace un año se subastaron entre el personal universitario, en tiempo y forma se publicaron convocatoria, fallo y decreto, con el nombre del comprador, el tipo de vehículo, modelo y precio en que se vendió.
De las siete que este año se entregaron, solo se conoce algo de esa Cherokee, que desde agosto está a nombre de la esposa del Secretario de Finanzas universitario y eso poco que se ha podido averiguar, es suficiente para configurar no pocos delitos y complicidades.
Por eso es importante que el señalado acuda ante las comisiones legislativas que lo requieren, para aclarar el contexto de los evidentes hechos de corrupción en investigación.
Su ausencia, lo dijeron ayer en la representación popular, confirma que en efecto son ciertas las acusaciones y por eso, determinaron darle otra oportunidad para que la semana entrante responda al requerimiento, so pena de empezar a aplicarle sanciones administrativas.
La cita ahora es también para el Director de Control Patrimonial, MARCO TULIO TRETO SOTELO, por las responsabilidades incumplidas en la supervisión y seguimiento de los haberes universitarios.
¿Hasta dónde ha de llegar esto?
La lista se antoja interminable de presuntos implicados y recursos públicos sin destino conocido por esos mentideros.
A pregunta expresa, la diputada Presidenta, ÚRSULA PATRICIA SALAZAR MOJICA respondió que, en efecto, se registró como aspirante a la candidatura de Morena para la Presidencia Municipal de Tampico.
Pero ella, como sus compañeros, abundó, están ciertos que su prioridad ahora, es el encargo que les confió la ciudadanía como representantes populares y en ello tienen concentrados todos sus fanes.
Eventualmente, allá de marzo podrían estar pidiendo licencia aquellos que vayan a la candidatura, en las consideraciones del partido y el pueblo, que es finalmente quien pone candidatos, gobernantes y legisladores.
Aunque la legislación es generosa y, en su caso, los diputados pueden andar en campaña y hasta ser funcionarios electos, sin tener que dejar la curul necesariamente.