En más de una ocasión nos han advertido sobre los políticos: que tienden a engañarnos, que nunca nos dicen o explican sus verdaderos propósitos; pero, además, con eso de las redes sociales nos enteramos de todo lo que hacen y, la verdad, en ocasiones la riegan, cometen errores o pifias. Y es cuando nos preguntamos, ¿voté por él? ¿Me está fallando? Nos quejamos, por ejemplo, de que los diputados son nuestros y las más de las veces se comportan sumisos, obedientes a los dictados del Ejecutivo, sea un gobernador o un presidente de la República.
¿Cuál es el papel del ciudadano? En principio hay uno muy significativo: votar en los procesos electorales. Y el segundo, que siempre se olvida, es vigilar, convertirse en un vigilante de la actuación de su representante popular. A los diputados, de siempre, los han acusado de ser levanta dedos, por eso en una conferencia universitaria Víctor Gordoa, el experto en imagen, confesó que a sus clientes siempre les pregunta: ¿has sido diputado? Ni lo digas, les recomendaba.
EL CIUDADANO MEXICANO
¿Cómo somos los mexicanos? Hay muchas versiones, pero en relación con la política, me quedo con la derivada de unas encuestas de cultura política: no le interesa la participación ciudadana. Los datos son elocuentes: al 60 por ciento de los mexicanos no le interesan los problemas de su comunidad. Son indiferentes a los problemas que son comunes a todos, mientras el no resienta sus efectos. Y eso se traduce, en los procesos electorales, en un abstencionismo, que en algunos casos ha llegado hasta el 55 por ciento.
Incluso en la elección federal ultima, en la presidencial, efectivamente hubo votación que no deja lugar a dudas sobre el triunfo de Claudia Sheinbaum; pero en la votación total, Morena logra una mayoría simple, no aplastante, pero que, gracias a una interpretación de la ley electoral, recibe más del 25 por ciento de los diputados y senadores. En aquel momento, al día siguiente de la elección, la Secretaria de Gobernación (no la electoral) hace el anuncio de la composición de las cámaras, interpretación que se siguió.
VIGILANCIA CIUDADANA
¿A quién debe vigilar el ciudadano tamaulipeco? Yo creo que a todos los que ocupan cargos de elección popular y a quienes, por nombramiento, tienen una tarea y responsabilidad. En este contexto, creo que debe de ubicar, en primera instancia, a quienes, por sus ambiciones, tienen en mente prepararse para un mejor cargo. Vamos pues, no se puede negar que, por ejemplo, Olga Sosa piensa que ya tiene la candidatura a la gubernatura en la bolsa. Hay, entonces, que vigilar su trabajo en el Senado, donde es secretaria de la Comisión de Asuntos de la Frontera Norte. Por cierto, Imelda San Miguel, la senadora panista, es parte de la misma comisión.
Hay que vigilar, también, el trabajo que realice Maki Ortiz: fue panista, fue morenista y ahora es del verde, pero ella, en su ambición, quiere ser gobernadora del estado. Y en su favor, hay que anotar su capacidad para allanar el camino hacia sus propósitos: le ganó, por ejemplo, la delantera a Eugenio Hernández Flores, que no llegó a la senaduría porque la votación no fue suficiente… pero Maki, inteligente, abusada que es, negoció con el Verde y fue suplente y ya es titular, presidenta de la Comisión Senatorial del Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático… temas de intenso interés de la Presidenta.
NOMBRAMIENTOS
En esta coyuntura de que los ciudadanos vigilen a legisladores y servidores públicos, vale anotar algunos de los más recientes: sorprendió, por ejemplo, el nombramiento de Américo Villarreal Santiago en Coahuila como delegado de Bienestar Social; se hace hincapié en que su novia es Cecilia Guadiana, joven senadora y, potencialmente, candidata a la gubernatura. Hay que tomar en cuenta también a Olga Sosa: es senadora de Morena, secretaria de la Comisión de Asuntos de la Frontera Norte. Y su ventaja es que le gusta trabajar, al menos nunca se duerme en sus laureles… para un buen grupo de morenistas tamaulipecos, está enfilada en la ruta de la sucesión de Américo Villarreal Anaya.
Uno de los últimos nombramientos destacados es el de Juan Vital Román Martínez como nuevo titular del Crede de la región centro, asentado en Victoria. Juan Vital es Licenciado en Informática por el Instituto Tecnológico de Victoria, es maestro por la Escuela Normal Superior de Tamaulipas y cuenta con una Maestría en Docencia por la Universidad Autónoma de Tamaulipas. Y la importancia de su nombramiento radica en la tarea, digamos no institucional, sí en la política: dadas las relaciones tirantes entre el líder Arnulfo Rodríguez y Lucia Aimé Castillo, es preciso vigilar su postura: si será institucional o sindical.
CIUDADANO APÁTICO
En fin, el detalle como diría Cantinflas, es que el ciudadano mexicano es por naturaleza apático a los temas de la política. Si no vota, menos se convertirá en un censor de la actuación de sus gobernantes y de sus representantes populares. Y en la práctica, la única forma de castigar a quien no cumple, es en las urnas. Por eso, más de un presidente municipal tuvo problemas para reelegirse.